Aranguren contra la energía estatal

El ministro de Energía, Juan José Aranguren, dijo que la recuperación energética sólo llegará a través "de la inversión privada". ENARSA volvió a comprar gas a Chile a más del doble de lo que podía comprarlo a Bolivia.

 jueves, 1-junio-2017


Nada de lo que deba ser estatal permanecerá en manos del Estado. Aquel viejo fallido menemista del ex ministro de Obras Públicas, Roberto Dromi, vuelve a adquirir vigencia con las nuevas declaraciones del ministro de Energía y ex CEO de Shell, Juan José Aranguren, quien dijo que “la energía no debe estar en manos del Estado sino de los privados”. Lo grave es que, en el caso de Aranguren, no hubo traición del inconsciente sino pura sinceridad. Un sincericidio energético.

Aranguren volvió a dejar frases polémicas que dan cuenta de su visión sobre un recurso estratégico para el país. Por un lado, dijo que con los grandes aumentos de tarifas que hubo hasta ahora sólo se cubre “un 40 ó 50 por ciento del costo de generación”, lo cual hace prever más aumentos a futuro (¿post elecciones, quizás?). Andrés Repar, ex vicepresidente del Enargas, reparó en que “es cierto que no hay desarrollo sin energía, pero también es cierto que no hay desarrollo con energía cara”.

Por otra parte, sostuvo que “la Argentina tiene los recursos para pasar de ser un país importador a ser exportador de energía”. Siguiendo con su razonamiento primero, esos recursos deberían ser explotados por los privados que, sin la regulación del Estado, llevarían adelante un nuevo saqueo de los recursos naturales patrios. Para Repar, esto no se trata de otra cosa que de la intención de “satisfacer los negocios de sus amigos que están en las petroleras o en las distribuidoras”. “Aranguren tiene un pensamiento oligárquico más que neoliberal. Además, miente”, remató Repar.

De hecho, Aranguren fue muy criticado en las últimas horas por disponer una nueva compra de gas a la ENAP –la empresa estatal chilena-, que en realidad le compra el gas a British Gas, que a su vez pertenece a Shell. La empresa holandesa cuya filial argentina presidió Aranguren, el ministro de Energía de la CEOcracia.

Esa compra invernal de 276 millones de metros cúbicos se dispuso a un precio de 8,07 dólares por millón de BTU, mientras Argentina tiene firmado un convenio con Bolivia para compra de gas a 3 dólares por millón de BTU. Otra opción podría haber sido regasificar GNL de barcos extranjeros en los puertos de Bahía Blanca y Escobar, con lo cual el millón de BTU se hubiera pagado a 4,50 dólares. Los hogares y la industria ya empiezan a temblar por la llegada del invierno y los problemas que acarrea, pero en Argentina lo que goza de plena energía son los favores a las grandes corporaciones y el quebranto contra el Estado nacional.

“Aranguren tiene un pensamiento oligárquico más que neoliberal. Además, miente”.

Andrés Repar, ex vicepresidente de ENARGAS