Aumentos imparables y la peor caída del salario

Un informe del Instituto Estadístico de los Trabajadores indica que el aumento de los precios de abril a mayo pasado fue el peor desde enero de 2016. Pérdida de poder adquisitivo del salario formal; ni hablar de los trabajadores "en negro".

 jueves, 7-junio-2018

Productos como yogures o quesos han desaparecido de la canasta de los más pobres.


La inflación de los trabajadores fue del 2,8% en mayo. Acumula un 12,9% en lo que va del año y un 27,1% en los últimos doce meses. Los alimentos treparon el 2,6% en mayo (21,8% en el último año). Todos los rubros tuvieron subas mayores al 2%, excepto frutas. En mayo, el 71% de 327 rubros registró alzas mayores al 1,5% respecto a abril. No se registraba una cifra así desde enero de 2016: verduras, +3,9%; arroz y cereales, +3,7%; aceite, +3%; lácteos, 2,5%; carnes, 2,3%.

Los datos son parte del relevamiento mensual que realiza el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) creado por la Universidad Metropolitana de los Trabajadores, CITRA y más de 50 organizaciones sindicales de la CGT y la CTA. Coinciden con lo que mostró a principios de mes el Centro de Almaceneros de Córdoba y sugieren que el IPC llegará a fin de año a cerca del 30%, como ya el mismo Banco Central comienza admitir.

El estudio de IET señala que el salario real formal volvió a deteriorarse en mayo de 2018 y se ubica en el nivel más bajo desde julio de 2016. Hay que recordar que un tercio de los trabajadores están en la informalidad, y para ellos el deterioro fue mayor, al quedar fuera de juego de las por sí escuálidas paritarias. Desde septiembre pasado, los salarios formales cayeron un 5,9%. Respecto a noviembre de 2015, la caída es de 8,4 puntos.

En 2016 el poder adquisitivo bajó un 5% y se recuperó parcialmente en 2017 (+3%). Pero en 2018 arrancó con una baja interanual del 1,3% en los primeros cinco meses.

Hay más datos, y son todos negativos. Desde noviembre de 2015, la inflación fue marcadamente más intensa en los hogares asalariados de menores ingresos, debido al impacto asimétrico de las subas de servicios públicos. En el Decil 1 (10% de menores ingresos), la inflación acumulada desde 2015 llegó al 121,3%. El en Decil 2, del 110%. En el Decil 10 (10% de la población con mayores ingresos) la inflación acumulada fue del 93,4%.