Bonadío ataca de nuevo

El juez de la servilleta menemista elevó a juicio oral la causa contra Cristina Kirchner por supuesto encubrimiento a los acusados iraníes por el atentado a la AMIA, expediente que se basa en la denuncia que presentó el fallecido fiscal Alberto Nisman y que el juez federal Daniel Rafecas había desestimado en dos oportunidades por ausencia de delito. Entre los enviados a juicio están Héctor Timerman, Carlos Zannini, Oscar Parrilli, Luis D'Elía, Fernando Esteche, y Jorge Khali, además de otros dirigentes y exfuncionarios.

 lunes, 5-marzo-2018

Bonadío ha funcionado como el ariete judicial en la persecución contra CFK y otros exfuncionarios.


El famoso Memorándum con Irán, que nunca entró en vigencia porque debía ser aprobado por el Congreso, es el motivo de la nueva avanzada del juez de la servilleta menemista contra la exmandataria y varios de sus principales funcionarios, acusados de haber pergeñado en 2013 ese entendimiento entre Argentina y la república islámica para exculpar a los iraníes sospechados de volar la AMIA en 1994.

“Dadas las probanzas recolectadas en este sumario, se consideran reunidos los extremos necesarios para que el mismo pase a su ulterior etapa, en relación a los doce imputados indicados al comienzo de la presente resolución, como acertadamente propician el fiscal Taiano y las querellas”, apuntó Bonadio en su fallo, que además incorpora a Héctor Timerman, Carlos Zannini, Oscar Parrilli, Luis D’Elía, Fernando Esteche, Andrés Larroque, Juan Martín Mena y Angelina Abbona, exprocuradora del Tesoro.

“Este juicio es una farsa, parte de la persecución política llevada a cabo por un sector del poder judicial”, advirtió Aníbal Ibarra, quien había asumido la defensa de la expresidente y hoy renunció aduciendo que “muchos aprovechaban la tragedia de Cromañón para golpear” a CFK. “No es justo ni posible que además de defenderse ella de la persecución política y judicial a la que es sometida, tenga que ocuparse también de todo esto”, argumentó Ibarra.

Testigo clave, menos para el juez

Además de que el supuesto delito de CFK había sido desestimado en dos oportunidades por el juez federal Daniel Rafecas, y confirmado en instancias superiores, Bonadío retomó el caso luego del triunfo de Macri y cargó contra la expresidenta, a quien procesó días antes de que asumirá su banca de senadora.

En su fallo, el juez que fue denunciado por Cristina como responsable de no haber investigado el hecho en la década del 90, no incorporó en su escrito el testimonio de Ronald Noble, ex director general de Interpol, que en reiteradas oportunidades aseguró que Argentina no había solicitado el levantamiento de las alertas rojas sobre los iraníes sospechados de haber participado en la voladura, como sostiene el magistrado.

El testimonio de Noble, cuya versión se conoció tres días después de que Nisman presentara su denuncia en enero de 2015, era lapidario y destruía la base de la acusación. Curiosamente, Bonadio jamás pidió su testimonial, pese a que Noble en más de una ocasión se ofreció a declarar. De todas maneras, el ex director de Interpol podría declarar en el juicio oral si es que el tribunal designado así lo entiende importante, incorporando una prueba valiosa, salvo para Bonadío.