Carne trémula

Durante el 2020, el principal alimento de los argentinos registró aumentos por encima de la inflación. En un contexto de pandemia, la demanda de los exportadores de carne estimuló el incremento de los precios en el mercado interno y contribuyó, al mismo tiempo, a profundizar la pobreza de los sectores de menores ingresos que no alcanzaron a cubrir la canasta básica familiar.

 lunes, 21-diciembre-2020

Los precios de la carne para el mercado interno duplicaron la inflación durante el 2020, limitando el acceso a los sectores de menores ingresos.


Ni siquiera una pandemia logró poner freno a la ambición de los especuladores de siempre. Según un informe realizado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), los precios de la carne superaron ampliamente a la inflación: mientras el INDEC señaló un acumulado del 35,8%, cortes como el osobuco y el asado tuvieron incrementos por encima del 60% en lo que va del 2020. A pesar de esta injusta situación, el consumo per cápita anual se mantuvo estable respecto del año 2019, cuando hubo una caída del 10% y sin coronavirus.

De acuerdo a datos de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), la cantidad de toneladas de carne destinadas a la exportación subió 8% respecto del año pasado, pero cayeron 0,5% en el mercado interno. Si bien el ingreso de divisas siempre es una buena noticia para un país acorralado por el endeudamiento récord que el macrismo supo conseguir, la demanda de los exportadores estimuló el aumento de precios para uno de los principales alimentos de la mesa de los argentinos y provocó que la oferta de animales, muchas veces, no sea suficiente para el consumo del país.

Según señaló a Página 12 el titular de la asociación, Miguel Schiariti, el 73,9% de los embarques de carne argentina son exportados a China “a un precio menor”. Para el representante, podría existir un “negocio financiero” en donde “subfacturan” los valores de venta y “aprovechan” la diferencia por el tipo de cambio: dicho de otra manera, no declaran todas las exportaciones y liquidan en el mercado negro a un dólar más alto que el oficial.

La jugada especuladora del sector repercute en el acceso a los alimentos de gran parte de los argentinos. En medio de una crisis inédita mundial, la importante suba en los precios de los productos básicos – y de la carne puntualmente – contribuye a que los más vulnerables no logren cubrir la canasta básica familiar. A pesar de que la Secretaría de Comercio Interior lanzó, para las fiestas, un programa de precios de cortes de carne con descuentos de hasta el 30%, la asistencia del Estado no logra compensar los fuertes incrementos, la pérdida del poder adquisitivo y, en consecuencia, el aumento de la pobreza que alcanzó al 44% de los argentinos, según el último relevamiento de la UCA.