Colombia se alza contra el ajuste
En medio de un paro nacional, una multitudinaria marcha protestó contra el programa político-económico de ajuste del presidente Iván Duque. El país cafetero se suma al contexto de tensión continental.
jueves, 21-noviembre-2019

Las movilizaciones en Bogotá inundaron las calles. Lo mismo sucedió en otras ciudades grandes.
Multitudinarias protestas se alzaron en toda Colombia este jueves en rechazo, fundamentalmente, a un paquete de ajuste que estaría pronto a lanzar el gobierno que encabeza Iván Duque. Las marchas tuvieron protagonismo de distintos sectores: sindicatos, partidos políticos, estudiantes y comunidades indígenas.
Las manifestaciones tienen lugar en el marco de un paro nacional y mientras el gobierno decidió cerrar las fronteras, poner a las fuerzas militares y policiales en alerta máxima. En algunas ciudades, como en Cali, hasta se decretó toque de queda.
El gobierno de Duque prepara un paquetazo de ajuste, con fuertes medidas económicas y sociales que impactarán en las clases más vulnerables. La más polémica es la eliminación del fondo nacional de pensiones (Colpensiones), aunque también planea reducir los salarios de los más jóvenes a un 75 % del mínimo.
“Es un acumulado de situaciones que esperamos nosotros que, así sea en una gran mesa nacional de concertación, empecemos a revisar” tras la jornada, explicó a la agencia internacional AFP Julio Roberto Gómez, presidente de la Confederación General del Trabajo, una de las organizadoras.
Los estudiantes participan de las protestas reclamando mayor presupuesto en Educación, mientras que las comunidades indígenas le exigen a Duque que tome medidas para frenar la ola de asesinatos contra líderes de las comunidades y dirigentes sociales.
Aunque las protestas tuvieron su epicentro en Bogotá, también se registraron marchas masivas en Medellín, Cali, Cartagena y Barranquilla. En algunas de ellas, la acción de las fuerzas represivas dejo escenas de violencia, aunque no fue el tono generalizado de las movilizaciones.
De este modo, Colombia suma un foco más de tensión en un continente absolutamente convulsionado por los sanguinarios hechos acaecidos en Haití, por las protestas contra el acuerdo con el FMI en Ecuador, por el rechazo a la desigualdad en Chile (donde la represión del gobierno de Piñera generó decenas de muertos y miles de heridos y detenidos) y por el golpe de Estado en Bolivia, con las posteriores masacres ordenadas por el gobierno de facto.