De Dieguitos y Cristinas
En su primera entrevista luego de dejar la presidencia, Mauricio Macri habló con TN y justificó los fracasos de su gobierno porque, según dijo, dejó de "salir a explicar lo que pasaba". De vuelta en el ruedo político, el ex presidente volvió a elegir a Cristina Fernández como contrapunto para construir posición opositora.
martes, 13-octubre-2020

Macri dio su primera entrevista después de la salida del poder a Joaquín Morales Solá y comparó a la vicepresidenta con Maradona.
Más cerca de un spot de campaña que de una entrevista periodística, Mauricio Macri reapareció en formato preguntas y respuestas por TN y pudo decir todo lo que quería decir sobre el fracaso de su gobierno, sobre la figura de Cristina Fernández de Kirchner y volvió a echarle la culpa de la debacle económica al triunfo de Alberto Fernández en las PASO.
Diez meses después de dejar el poder, el ex presidente eligió nuevamente el lugar de víctima de las circunstancias para elaborar algo que intentó ubicar en una forma de autocrítica. “Yo podía contar lo que pasaba o expresar un optimismo por lo que se podía lograr y elegí lo segundo. Con el diario del lunes, creo que me equivoqué porque después se sucedieron los esfuerzos y la ciudadanía se fue agotando, especialmente la clase media empezó a sentir que el esfuerzo no terminaba nunca y no era lo que yo había generado”, dijo y atribuyó la ineptitud para resolver la crisis política, económica y social que produjo su gobierno a una cuestión comunicacional.
“Aquel diciembre de 2017, después de una elección increíble asistimos a un espectáculo terrible: el massismo se juntó con el kirchnerismo, colapsaron la sesión (por la reforma previsional), 10 toneladas de piedra (lanzadas por manifestantes), y aunque salió la ley nos pusimos en una situación defensiva, y dejé de salir a explicar”, argumentó. “Tuve que vetar leyes que no ayudaban y ahí ya el modo defensivo me llevó a perder la capacidad de escuchar. Dejé de explicar por qué estaba pasando cada cosa y esa situación hizo que gran parte de la sociedad dijera ‘esto no va más’ y recién recuperé la capacidad de escuchar en las últimas marchas que hice, pero ya era tarde”, explicó.
Y a propósito de escuchas, Macri aseguró que no ordenó a la Agencia Federal de Inteligencia realizar espionaje ilegal y que “nunca existió una orden de hacer ningún tipo de espionaje”.
En el racconto de los fracasos, Macri también atribuyó a las elecciones primarias el comienzo del fin de su gobierno. “Fue tremendo; porque la gente vio que el esfuerzo no daba sus frutos y se volvió al pasado de más pobreza y más problemas”, dijo. También apuntó contra sus alianzas con el peronismo para hablar de la debilidad política de su gestión. “Nunca debí haber delegado la negociación política, la dejé en mano de este grupo de gente filoperonista (por Emilio Monzó-Rogelio Frigerio y Sebastián García de Luca) todo ese grupo, tanto de la Cámara de Diputados como los gobernadores”, señaló y dijo que no pudo resolver bien los problemas porque se sentía “tironeado”: “yo como ingeniero estaba tironeado por mesas de productividad o en viajar por el país o por el mundo o en reunirme con (la jefa del PRO Patricia) Bullrich para tratar el tema de la lucha contra el narcotráfico”.
La figura de Cristina sigue siendo la favorita de Macri y su espacio político para construir el relato opositor y, en la charla con TN, el ex presidente la definió como algo parecido al origen de todos los males argentinos. “La vicepresidenta está conduciendo el Gobierno como todos pensamos que iba a suceder. Tiene una agenda propia en la que ella necesita, bloquear, someter a la Justicia”, dijo, y la comparó con Maradona. “Siempre se ha dicho que Boca es peronista. Es mentira, Boca es de todos los partidos y muchos credos religiosos. Boca es pasional, vehemente como es el peronismo. Cuando yo llegué a Boca tenía que construir un puente entre esa vehemencia, esa pasión, y una cierta racionalidad. Porque sin reglas, un club de fútbol tampoco funciona. Para eso tuve que hacer algo durísimo, porque también era mi ídolo, que fue sacar a Diego Maradona de Boca. Y ahí se construyó. El peronismo está en el mismo desafío, que es lograr separarse de Cristina Kirchner”, dijo y aclaró: “La comparo en la irracionalidad, no en el talento”, definió. “El peronismo está secuestrado por Cristina Fernández de Kirchner hace más de diez años y eso significa que ha sido cooptado por la irracionalidad”