De terror
15 allanamientos y tres personas detenidas fueron el saldo de los operativos policiales en la ciudad de Córdoba, ordenados por el fiscal Gustavo Dalma, quien con la excusa de investigar actos violentos ocurridos en la última marcha contra el gatillo fácil, arremetió contra murgas, locales partidarios, centros culturales, comedores populares y hasta viviendas particulares, reeditando prácticas que nos llevan a los años más trágicos de nuestra historia.
jueves, 31-agosto-2017

Los allanamientos fueron abusivos y se realizaron en distintos lugares de Córdoba.
La ferocidad de la policía de Córdoba no es novedad, pero volvió a ser noticia a partir de una serie de operativos ordenados por el fiscal Gustavo Dalma, quien libró una orden de allanamiento sobre distintas organizaciones sociales, culturales, políticas, que terminó con tres personas detenidas, destrozos y secuestro de elementos de murgas, además de ingresar de manera violenta a una vivienda en barrio Güemes donde vive una pareja con una beba de siete meses.
La acción está vinculada con la investigación que Dalma lleva adelante por los daños a comercios y edificios públicos ocurridos durante la 3era Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil, que organizó la Coordinadora de Familiares asesinados a manos de la policía.
Reeditando las peores prácticas de la dictadura y de los años previos que habilitó el Navarrazo, la policía allanó con brutalidad los locales del Partido Obrero, el Ateneo Social Anarquista y la Biblioteca Popular de Villa La Maternidad, el Comedor del Frente de Organizaciones en Lucha, de Barrio Müller, el local del Partido de la Victoria, el espacio cultural Bataclana, la casa del fletero que trasladó material a la movilización del lunes, y la Biblioteca Leopoldo Marechal.
Otro de los lugares atacados fue el espacio Kasa Karakol, donde se realizan talleres de percusión, y ahí los uniformados incautaron bombos, banderas y leche. Según el portal La Tinta, hay testigos que afirman que los procedimientos se concentraron en buscar “elementos con símbolos anarquistas” y que la policía se llevó banderas, bombos, carteles, volantes, material bibliográfico y otros elementos “vinculados al anarquismo” y a los pedidos de aparición con vida de Santiago Maldonado, pero nada que pudiera involucrar a estas organizaciones con los actos vandálicos.
En conferencia de prensa el fiscal Dalma defendió su actuación y sostuvo que “todos los allanamientos estuvieron justificados”. Además, señaló que “secuestramos importantes elementos de pruebas para probar la participación de personas que cometieron delitos comunes, y que no tienen ninguna finalidad política”.
Una de las organizaciones afectadas, el Frente de Organizaciones en Lucha, emitió un comunicado en el que denuncia que “este accionar de la policía deja en claro la decisión del gobierno de avanzar en la persecución política y el amedrentamiento hacia los que luchan”.
Integrantes de la comunidad mapuche en Chubut sostienen que la desaparición de Santiago Maldonado tuvo el objetivo de “enviar un mensaje al resto de la sociedad, para que no se involucre en nuestra lucha por la defensa de la tierra”. Un día antes de la marcha nacional por la aparición del joven, que se realizará este viernes en Córdoba desde las 18hs en sintonía con movilizaciones en todo el país, y en plena disputa con Cambiemos para ver quién expresa mejor el paradigma del garrote, el gobierno cordobés acaba de enviar el suyo.