Desbalanceadas

La balanza comercial tuvo en el primer semestre del año su déficit más alto en 23 años, y la tendencia es que se mantendrá hasta que no se baje el rojo fiscal, un desafío por demás complicado en un año electoral.

 martes, 22-agosto-2017


La famosa anécdota de Néstor Kirchner y su cuadernito Gloria, donde el ex presidente anotaba de manera religiosa, y antes siquiera de desayunar, los números de la balanza comercial y fiscal para chequear que fueran superavitarios, es cosa del pasado, incluido el kirchnerismo que protagonizó CFK.

Como publica un informe del portal En Orsai, entre 2002 y 2007 ambas variables funcionaron en sintonía y alcanzaron cifras record, empujados por una reestructuración impositiva y el boom del precio de la soja. Pero los superávit “gemelos” se separaron a partir de 2009 para no volver a juntarse con indicadores positivos de manera simultánea.

Es más, para el primer semestre de 2017 la economía muestra ambos números en rojo. Mientras que los datos de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) señalan un déficit fiscal de $ 246.300 millones para los primeros seis meses –un 76 por ciento superior a igual período del 2016–, el último informe de Intercambio Comercial Argentino del Indec revela un pasivo comercial de US$ 2613 millones. Es el balance deficitario más profundo desde los US$ 2900 millones registrados en el mismo lapso de 1994.

El mecanismo que mantiene el gobierno de Macri es similar al de los ’90: se endeuda en el exterior y financia ambas cuentas. Para Gabriel Caamaño Gómez, socio y director de la Consultora Ledesma que cita En Orsai, el origen de los déficit gemelos es el excesivo gasto público: “Se derrumbaron los superávit gemelos cuando los niveles del gasto empezaron a superar a la tasa de crecimiento del PBI. Este manejo de la balanza comercial se mantendrá hasta que se reduzca el déficit fiscal”.

En la misma línea, un informe de FyE Consult sostiene que “el resultado del mix de política económica de hiper gradualismo fiscal, financiado con deuda externa, y política monetaria contractiva genera una apreciación del tipo de cambio y un incremento de los bienes importados”. Para esta consultora, la tendencia gradualista se mantendría y el déficit de la balanza de pagos podría alcanzar los US$ 23.300 millones en 2017, casi un 4 por ciento del PBI:“Cabe esperar que el Gobierno siga financiando su déficit con endeudamiento externo y que el desequilibrio de la balanza de pagos se mantenga”.