Diez durán-frases de un Macri típico

Admitió que hay gente enojada porque no llega a fin de mes pero insistió con que, como los jarabes amargos, era el único remedio. Endeudador serial, dijo que no se puede vivir de prestado y ponderó como un logro que ya no haya "cadenas nacionales que nos invadan". "Estamos mejor posicionados", dijo el día que se conoció que las fábricas trabajan al 50% de su capacidad. Las durán-frases de Macri, todas juntas, en clave electoral.

 miércoles, 13-febrero-2019

Macri auténtico: habla de crecimiento espiritual por los golpes recibidos, mientras la economía se derrumba.


“Hoy estamos mejor posicionados hacia el futuro de lo que estábamos en 2015”. “Estamos en una posición más sólida”. “Tenemos los medios públicos más plurales de la historia” y el hit de Cambiemos: “Se vivía por encima de nuestras posibilidades”. Otra, de selección: “Este (el ajuste) es el único camino”.

Esas fueron algunas de las durán-frases que emitió el presidente Mauricio Macri en una entrevista que otorgó a FM Pasión 96.5, de la localidad de Buena Esperanza, en la provincia de San Luis. Allí, además destacó como uno de los logros fuertes de su gestión la desaparición de las “cadenas nacionales que invaden la vida de los argentinos”. Un Macri auténtico: no da datos concretos, no sostiene lo que dice con información oficial, cuando compara situaciones lo hace al boleo, no habla de actualidad sino sólo como telón de fondo (nunca como elemento central) y comenta la realidad desde afuera.

En la colección de frases hechas y de corte electoral que pronunció, Macri tiró otra que, si no fuera dramática, sería un “colmo”. El colmo del endeudador, por ejemplo. “No se puede vivir de lo prestado ni gastar más de lo que tenemos”, sostuvo sin ponerse colorado. Cambiemos se financió con deuda durante toda su gestión y hace unos meses firmó un stand by con el FMI por 57 mil millones de dólares, la mayoría de los cuales se destinarán a servicios de deuda. Este año los intereses de la deuda aumentarán unos $ 195 mil millones, por lo cual el total de fondos destinados a ese próposito ascenderá a $ 596 mil millones. Es decir, un crecimiento de 49% con respecto a 2018 y de un 73% comparado con 2015.

Para Macri, la pobreza que será récord en la próxima medición, la caída del salario, los tarifazos, la inflación que carcome los ingresos y el megaendeudamiento, además de la recesión que paraliza casi el 50% de la capacidad industrial instalada son “golpes” producidos por “todas las tormentas que enfrentamos el año pasado por causa de la sequía y el corte de crédito mundial a los países emergentes”.

Empático sin involucrarse, como indica al manual del candidato, le dijo a sus votantes arrepentidos o en vías de revisar el voto que “hay gente enojada y mucha gente angustiada porque cuesta más llegar a fin de mes, porque nos hemos chocado contra una realidad”. Pero eso, claro, no tiene que ver con sus decisiones de los últimos tres años, sino con la pesada herencia.

Además de compendio de durán-frases, Macri jugó con el verbo crecer, algo que definitivamente no hizo la economía ni la distribución del ingreso desde que él es presidente. Lo hizo en términos de crecimiento espiritual, como si fuera un gurú: “Hemos crecido a la luz de todas estas dificultades que hemos enfrentado y hemos entendido que no podemos vivir de prestado o gastar más de lo que tenemos. Este es un camino que nos ha golpeado, que no es fácil, yo entiendo a aquellos que están angustiados o enojados, pero créanme que es el único camino”, postuló.