El costo Aranguren
El aumento del 7,2 % a la nafta y el 6% para el gasoil hizo que medido en dólares, la Argentina esté por encima de países que están en guerra, como Afganistán, Irak, Siria y otros países africanos.
viernes, 7-julio-2017

El precio de los combustibles está desregulado desde octubre, pero a las petroleras no les alcanza.
Históricamente el precio del litro de nafta súper en Argentina se medía en relación al precio de un dólar. Pero con la irrupción de la gestión Aranguren, ex presidente y accionista de Shell, el litro de nafta súper de la estatal YPF está entre 1,17 y 1,20 dólares, según la región del país.
Esto hace que el argentino no sólo sea el segundo mercado de combustibles más caro de la región después de Uruguay, sino que duplica el precio de los que se venden en naciones de Medio Oriente y África, a 0,55 dólar. En Siria, que padece una guerra civil desde 2011 con parte de su territorio ocupado por milicias extremistas, el litro de nafta cuesta 1,03 dólar, mientras que en Camerún, dividido por acción de la milicia islámica de Boko Haram, el precio es de 1,05 dólar.
Según publicó el sitio iProfesional, esta insólita desproporción del precio argentino de la nafta se explica por la decisión gubernamental de aplicar subas periódicas para compensar la menor rentabilidad de las petroleras que exportan crudo. Apuestan a la buena sintonía y a los negocios de las petroleras exportadoras –para eso Aranguren llegó al Ministerio-, y a que las provincias productoras tengan más recursos propios y reclamen menos coparticipación nacional.
Por eso, el titular de la Cámara de Empresarios de Combustible, Raúl Castellanos, afirmó que “Argentina tiene precios políticos antes que económicos. Seguimos sin converger al precio del barril internacional. Otro componente que pesa y hace la diferencia es la carga impositiva, que es sumamente elevada”.
“Mientras los impuestos representan a nivel nacional casi el 90 por ciento del precio final de los combustibles, en Estados Unidos ese factor asciende sólo al 20 por ciento”.
Raúl Castellanos, titular de la Cámara de Empresarios de Combustible