“El desafío de la democracia es construir con el otro y no con uno mismo como hizo Macri”
El filósofo Darío Sztajnszrajber dijo que observa en Alberto Fernández “un deseo de poder mirar un poco más allá” y habló de la necesidad de construir una nueva subjetividad. También analizó el gobierno de Mauricio Macri y cuán lejos está el país de lo que sucede en la región.
viernes, 6-diciembre-2019

El filósofo Darío Sztajnszrajber valoró positivamente la posición política que asumió Alberto Fernández para su futuro gobierno
En diálogo con el programa Nada del Otro Mundo, el reconocido conductor del ciclo televisivo “Mentira la verdad” analizó el discurso de despedida de Mauricio Macri y se mostró esperanzado con la llegada del nuevo gobierno del presidente electo Alberto Fernández. Con relación a la gestión de Cambiemos, Darío Sztajnszrajber subrayó que lo mejor que le puede pasar a una sociedad democrática es que haya diferencias tanto en los modelos de país como en las formas de pensar la realidad. Pero destacó que el límite de esa diferencia es cuando se busca la disolución del otro: cuando hay gobiernos que destruyen derechos y formas de inclusión. “El desafío de la democracia es construir con el otro, y no con uno mismo que es lo que hizo Macri”, puntualizó.
En ese sentido, detalló que el verdadero reto de ahora en adelante está en la construcción de la subjetividad. “Lo importante es el lente a través del cual leemos la realidad”, afirmó el filósofo. A partir de esa idea, el ensayista sostuvo que ve en el futuro presidente “un desafío o un deseo de poder mirar un poco más allá”. “Me parece muy interesante el planteo de cómo ir hacia la grieta. En los lugares más ríspidos, Alberto Fernández tiene como una filosofía del ‘ni’: no quiero ni esto ni lo otro. Si sabe correrse de ambos lugares bipolares, eso ya me parece un montón”, determinó.
Al momento de comparar los relatos de Cambiemos y del Frente de Todos, Sztajnszrajber consideró que el gobierno de Macri se basó en una filosofía new age, en la exaltación de fantasías y de promesas infinitas que nunca se cumplían. “Las palabras más fuertes terminaron siendo ‘esperanza’, ‘confianza’ que son palabras que vienen más del mundo teológico y publicitario. Hoy la publicidad es la iglesia más importante que domina y maneja todas nuestras fantasías”, analizó. En cambio, calificó el relato de la campaña de Alberto Fernández como un discurso mucho más realista con una idea esperanzadora de un país mucho más inclusivo.
Al finalizar, el docente se refirió a la preocupante realidad de la región. Expresó que el miedo a que se replique en nuestro país una situación similar como la de los países vecinos va a depender de los pactos de gobernabilidad que se produzcan entre los distintos sectores que componen el Frente de Todos y la oposición. “Si los que terminan teniendo más peso son las partes más negociadores, le vendría bien a la Argentina cuatro años de sosiego que no impliquen renuncias ideológicas”, reflexionó. “Si logramos distinguir entre Estado y Gobierno, ahí habrá gestos de que Argentina termine siendo, al revés de lo que pasa en la región, un ejemplo de un país gobernable”, concluyó.