“El FMI no cambió”
Noemí Brenta, la economista que más estudió las relaciones con el FMI, se mostró muy preocupada por la decisión del gobierno de recurrir a un nuevo blindaje e insistió con que “hay que cerrar las canillas por las que se van los dólares”. “Hay una tormenta y nosotros abrimos las puertas de la casa”, graficó para entender la situación argentina en el contexto internacional.
miércoles, 9-mayo-2018

Para Brenta, el FMI pedirá "las condiciones que ya conocemos: devaluación, ajuste, flexibilización laboral y privatizaciones".
La decisión del gobierno nacional de volver al FMI es quizás la medida más impactante, aterradora y de mayor costo político de toda la era macrista. Noemí Brenta, economista autora del libro “Historia de las relaciones entre Argentina y el FMI”, analizó la situación y no escondió su preocupación por el anuncio del gobierno. Pronosticó que por mandato del organismo internacional sobrevendrán “reformas que nos achican y nos llevan a décadas atrás” y remarcó que “no estamos acordando con un organismo en el que tengamos una voz”.
El ministro Nicolás Dujovne intentó transmitir calma y aplacar el impacto de volver a acordar con un organismo tan ligado a momentos negros de la historia argentina diciendo que “el Fondo no es el mismo que hace 20 años”. Brenta lo cruzó y aclaró el panorama: “Cada gobierno es responsable de los términos en los que acuerda con el Fondo, pero algunos términos son los de siempre. El FMI no cambió, por más que Dujovne diga lo que diga”.
“Hay que ver cómo están los países que actualmente tienen acuerdos con el Fondo: en Grecia ves en cada cuadra a alguien durmiendo en la calle, cartoneros, miseria, chicos pidiendo, 20 % de desempleo”.
Noemí Brenta, economista especializada en relaciones con el FMI
La economista alertó por una práctica habitual del FMI: probar nuevas recetas en los países emergentes con los que acuerda. Y esas experiencias tienen consecuencias impredecibles. “Esperemos no ser conejitos de indias de un experimento porque no somos ratones. Somos personas, merecemos que no nos lleven al abismo”, disparó.
El chorro verde va para afuera
Brenta insistió en que el problema de la economía argentina es el déficit externo: “Si siguen abiertas todas las canillas de los pagos internacionales los dólares se van. Entrarán los dólares del FMI y se irán. Somos una economía muy vulnerable. Es como si hay una tormenta y vos abrís las puertas de tu casa”.
El 2001, más que una sombra
Consultada por los dichos de Cavallo –“podría haber un 2001 en unos años”-, Brenta aseguró que no ve al 2001 “como una sombra en el horizonte sino como una realidad que se ve en las estadísticas”. Resaltó que “hay una sangría de dólares que no se puede cubrir” y que si eso no se soluciona “podés pedir todos los dólares del mundo pero no te van a alcanzar”.
“Tenés que plantarte en el interés nacional. Si querés complacer a los mercados internacionales, les estás entregando un excedente que debería ir a la producción”, concluyó Brenta.