“El ministerio de Trabajo es un ministerio de Empresa”

El presidente de la Asociación de Abogados y Abogadas Laboralistas, Matías Cremonte, criticó fuertemente al ministro de Trabajo, Jorge Triaca. Analizó la gestión en la cartera laboral –que, según el gobierno, lo sostiene en el cargo- y dijo que incurre en “incumplimiento de deberes de funcionario público” porque se abstiene de intervenir en las relaciones laborales y, por el contrario, “hay un marcado intervencionismo en las organizaciones sindicales”.

 jueves, 1-febrero-2018

Matías Cremonte, de los abogados laboralistas, duro contra el ministro Triaca.


El ministro Jorge Triaca volvió a sus funciones tras unas vacaciones que, aunque intentaron maquillarlo, fueron apuradas por el escándalo con su empleada Sandra Heredia. Respecto a esto, Matías Cremonte, presidente de la AAL, dijo que el hecho de “que un ministro de Trabajo tenga una empleada en negro, la maltrate por teléfono y para ahorrase el sueldo la haga ingresar en un sindicato intervenido, no tiene comparación”. “Es una contradicción más”, agregó.

Ahora, el gobierno intenta limitar las paritarias y la relación con los sindicatos se tensa. El ministro está en el ojo de la tormenta. “En los términos del gobierno, Triaca viene haciendo una buena gestión. Ha invertido el rol del Ministerio de Trabajo: no está convocando a audiencias, ni defendiendo los puestos de trabajo. El Estado tiene que intervenir en la relación desigual entre capital y trabajo”, analizó Cremonte.

Por otra parte, opinó que la cartera que conduce Triaca se corre del lugar donde debería intervenir e interviene donde no corresponde: “Se caracteriza por un abstencionismo absoluto en materia de relaciones laborales en cuanto a intervención del Estado como garante de la aplicación del derecho del trabajo. Inversamente a esto, hay un marcado intervencionismo donde no debería haber: en materia de organizaciones sindicales. Hay una decena de sindicatos intervenidos en la mayoría de los casos sin motivo”. Cremonte aclaró que “esto va más allá de lo que uno pueda decir de las actitudes de algunos dirigentes sindicales”.

“Hasta ahora garantizó que las empresas hagan lo que quieran con los trabajadores. No es un Ministerio de Trabajo, es un Ministerio de Empresa, abiertamente a favor de los intereses de los empresarios”, disparó Cremonte.

Para el abogado laboralista, por todos estos motivos lo que sucede con Triaca es que “hay un incumplimiento de deberes de funcionario público”. En ese sentido, señaló que el ministerio no está entregando certificado de autoridades en algunos sindicatos. Esto, según Cremonte, puede ser utilizado como ‘apriete’: “Obstaculizan el funcionamiento sindical. Te aseguro que a muchos sindicatos les dicen ‘cumplimos con lo que tenemos que cumplir si te avenís a firmar esto’, que es, por ejemplo, reducir el salario de tus trabajadores”.