El rechazo a las reformas va tomando temperatura

Convocada por la CTA Autónoma, sindicatos y organizaciones políticas y sociales realizaron un paro nacional y se movilizaron en distintos puntos del país contra los proyectos del gobierno en material laboral y previsional, además de cuestionar la escalada represiva por parte de las fuerzas de seguridad estatales.

 miércoles, 6-diciembre-2017

Los trabajadores estatales no comen, parece que piensa el gobierno. Tuvieron paritarias muy por debajo de la inflación.


“Contra la represión y la reforma laboral”, fue la consigna de una multitudinaria movilización que atravesó el centro de Córdoba y otras ciudades del país para rechazar la política del gobierno nacional en materia de reformas laborales y el proyecto para modificar la fórmula que calcula las jubilaciones, que cada día cosecha nuevos rechazos.

Convocada por la CTA Autónoma, trabajadores nacionales de diversos organismos, provinciales y municipales salieron a la calle y se fundieron con decenas de organizaciones sociales y sindicatos que se aglutinaron alrededor de un plan de lucha que tiene por objetivo detener las reformas “proempresariales y precarizadoras de la administración de Mauricio Macri”.

El acto se realizó en la esquina de Colón y General Paz, y además de ATE se sumaron organizaciones territoriales como Barrios de Pie, la CCC y la CTEP, militantes del MTS y el Polo Obrero, cuyos dirigentes hablaron ante miles de personas que celebraron que sus representantes muestren unidad para resistir las políticas de ajuste que busca profundizar el macrismo.

María Liliana Salerno, titular de ATE Córdoba, fue una de las oradoras y afirmó que “como todos, venimos a esta movilización en contra de la reforma laboral, la previsional, el pacto fiscal, de los tarifazos. Estamos solicitando el cese de los despidos, que los compañeros despedidos vuelvan inmediatamente a sus puestos de trabajo y el 82% móvil para nuestros jubilados, que es una de las banderas históricas de nuestro gremio”.

En respuesta al discurso del gobierno y de las principales cámaras empresariales que ponen al salario como el obstáculo para tener competitividad, los dirigentes gremiales señalaron que “de cada ocho horas diarias de trabajo sólo una hora cincuenta se destinan al salario y aportes previsionales, el resto son utilidades”, y aprovecharon la importante concurrencia para convocar a una jornada de protesta para el próximo miércoles 13 de diciembre, cuando la legislatura provincial trate el presupuesto provincial e intente aprobar el pacto fiscal que Schiaretti acordó con Macri.