En el país de la liberté

Como para Mauricio Macri “el populismo es más peligroso que el coronavirus”, ayer abandonó el país, violó la cuarentena por segunda vez en menos de 20 días y viajó a Francia donde, según expresó, se “vive en libertad y responsabilidad”, a pesar de que allí la cantidad de muertos por Covid-19 representa casi el 900% del número de víctimas fatales que registra Argentina.

 viernes, 31-julio-2020

Mauricio Macri realizó su segundo viaje internacional en plena pandemia, acorralado por distintas causas judiciales relacionadas con el espionaje ilegal y la corrupción.


El ex presidente Mauricio Macri no sólo es un caso muy particular por haber asumido su cargo con más de 200 causas judiciales en su contra, sino también por rechazar y violar el aislamiento social, preventivo y obligatorio que rige en todo el país, mostrándose indiferente a la medida recomendada por especialistas para prevenir la expansión de la pandemia. Mientras el resto de la población está impedida de movilizarse de una localidad a otra para evitar la circulación del virus, el ex mandatario realizó – por segunda vez y en menos de 20 días – otro viaje internacional con el pretexto de tener actividades que cumplir como presidente de la Fundación FIFA.

Con un promedio de 36 días de vacaciones por año cuando era Jefe de Estado – sin contar los retiros espirituales que realizaba junto al “mejor equipo de los 50 años”- ahora Mauricio Macri emprendió su rumbo hacia Francia, adonde llegó hoy en horas de la madrugada argentina. A pesar de que el país europeo acumula una cantidad de muertos por Covid-19 que representa casi el 900% del número de víctimas fatales que registra Argentina, el empresario elogió a la sociedad francesa porque “vive en libertad y con responsabilidad”.

Casualmente, este desopilante alarde de la libertad podría estar relacionado con su complicada situación judicial que, si bien no le impide irse del país, lo compromete cada vez más. De hecho, su viaje fue interpretado como una huida de la Justicia. Esta semana se conocieron algunos chats de Darío Nieto, su secretario privado, que lo señalan como el responsable de autorizar los créditos millonarios que el Banco Nación otorgó de manera irregular a la cerealera Vicentin – acusada de simular una quiebra y fugar dinero – y también lo vinculan con las tareas de espionaje ilegal perpetradas durante su gobierno, con el objetivo de perseguir y extorsionar a opositores políticos, gremialistas, jueces, empresarios, entre otros.

La “fuga” del ex presidente también coincide con el rechazo de la jueza María Servini al pedido de su abogado, Pablo Lanusse, para que no se perite el flujo de llamados que se realizaban desde el teléfono celular de su defendido. Increíblemente, quien está sospechado de haber ordenado y liderado las actividades de espionaje ilegal, había argumentado que la disposición de la Justicia era “desproporcionada, arbitraria, carente de fundamento y violatoria de la intimidad”.