“Es un movimiento, no un regimiento”

Juan Grabois se refirió a las expectativas ante el cambio de signo del gobierno y dijo que "no hay margen para la decepción", al tiempo que subrayó la necesidad de no volver a considerar a los movimientos populares como una amenaza.

 jueves, 7-noviembre-2019

Juan Grabois dijo que el gobierno de Mauricio Macri consideró al campo popular como un regimiento y no como un movimiento.


A pocas semanas de la asunción de Alberto Fernández, Juan Grabois se refirió a las expectativas ante el cambio del gobierno, al lugar que ocupará la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular y los recientes ataques a la legisladora Ofelia Fernández.

En diálogo con el programa “Nada del Otro Mundo”, Grabois dijo que la transición sigue vigente y que “hay que ver qué nos deparan estos últimos días porque Mauricio Macri es una caja de sorpresas”. “Hay que ver cómo terminamos con la cuestión financiera, con las reservas”, aseguró, sin descartar nuevas malas noticias en esa área antes del 10 de diciembre.

“Los indicadores sociales, salariales y laborales son catastróficos y hay una porción enorme del puebloq ue la está pasando muy mal”; dijo y aclaró que ahí no solo están los pobres y los excluidos sino que con Macri aumentó muchísimo la cantidad de pobres”, dijo.

“Los sectores medios, los que tienen un buen sueldo, de 35 mil pesos, son pobres”, agregó en referencia a la pérdida del poder adquisitivo de más de la mitad de los asalariados del sector privado. “Están en una situación de vulnerabilidad”, dijo. “Si no tienen vivienda propia, mandan a los hijos a una escuela privada o pagan una prepaga, la situación es terrible para la clase media”, señaló.

En referencia a los estallidos sociales de Chile y la opresión económica sobre la clase trabajadora, Grabois dijo que “la grieta real no son las peleas de los políticos- consideró- son las contradicciones socio-económicas que existen y no se resuelven con buenos modales ni con buenas intenciones, se resuelven con políticas de redistribución de la riqueza”.

“Los asalariados del sector privado están en una situación de opresión”, definió. “Hay una mentalidad elitista que piensa que un laburante no se puede comer un asado un fin de semana, que no puede ir al teatro, no puede comprar un TV, no puede irse de vacaciones. Esa misma gente es la que piensa que un pibe de gorra es siempre un chorro que no merece otro destino que ir en cana”, agregó. “Contra esa mentalidad hay que combatir y no va a ser un combate fácil”.

El ataque a la madre de la legisladora Ofelia Fernández fue otro de los temas sobre los que opinó Grabois y dijo que “a ellos” les da miedo lo que “no pueden disciplinar”. “Esperan una cierta conducta que no es administrable, cómo vas a hablar de la reforma agraria, defender a Cristina, todo lo que molesta lo destrozan. A Ofelia le pasa eso con el agregado de la crueldad”. “Hay que ser un sorete para hacer algo así. Decir que una mujer que trabaja como asalariada desde 2017 en una financiera tiene que ver con el lavado es una estupidez como decir que un trabajador bancario de la city es parte de la elite financiera de Wall Street. Es una estupidez astronómica”.

Con respecto a lo que espera de la gestión de Fernández, el líder del CTEP dijo que “no hay margen para la decepción” y que ahora hay cinco millones de pobres más y emergencia alimentaria, por lo que existe la obligación de “durante los primeros 100 días se tomen medidas económicas que marquen el rumbo” en beneficio de los más vulnerables.

“Obviamente que hay un período de arranque donde todos vamos a apoyar para que el gobierno tenga un marco de gobernabilidad” y que desde su espacio “vamos a velar por los intereses de un sector particular que es el que peor la está pasando”.

Grabois también señaló que es necesario no caer en errores como el de considerar al campo popular “como un regimiento y no como un movimiento”.