“Esto es un avance neoliberal”
Adolfo Pérez Esquivel consideró que hay un fenómeno en toda América Latina que tiene como objetivo “judicializar a los gobiernos progresistas y sacarlos del medio”. Su encuentro con Lula, críticas a Bonadío y su visión de la economía: “Más pagamos, más debemos, menos tenemos”.
jueves, 23-agosto-2018

Lula junto a Pérez Esquivel. El Premio Nobel de la Paz pudo visitarlo en la prisión.
La situación política de todo el continente está candente. Los grandes poderes concentrados avanzan con sus brazos mediáticos y judiciales sobre los sectores que están en la otra vereda (los que ellos llaman “populistas”). Para Adolfo Pérez Esquivel, “lo que está pasando en Argentina y Brasil es una política impuesta en toda América Latina” que tiene como eje “judicializar a gobiernos progresistas y desprestigiarlos a través de los grandes medios de comunicación porque responden a otros intereses políticos”.
Nombró como ejemplos, aparte de nuestro país y el carioca, a Paraguay, con Fernando Lugo, a Ecuador, con Rafael Correa y la situación política en Honduras. Por eso, los sectores de la derecha llegan a ser gobierno mediante las urnas: “Hay una política de judicializar a gobiernos progresistas y sacarlos del medio. Esto es un avance neoliberal”. Las encuestas de Brasil son el mejor ejemplo.
Respecto al caso de las fotocopias, Pérez Esquivel dijo que “hay que castigar cualquier tipo de corrupción” pero advirtió que “esto no es eso, esto es una cuestión política”. “El gobierno está incentivando esto. Sergio Moro (NdR: el juez que juzgó a Lula) aquí se llama Claudio Bonadío. Es un juez que no tiene objetividad, ya venía de punta cuando Cristina era presidenta y tiene clara su misión”, apuntó. Para el Premio Nobel de la Paz, “han politizado todo de tal manera que la Justicia desaparece” y entonces la expresidenta “ya es condenada antes de ser juzgada”.
Su encuentro con Lula
Pérez Esquivel relató su reciente encuentro con Lula, a quien pudo ver en la prisión y con quien charló durante unos 45 minutos, acompañado del excanciller brasileño Celso Amorim. “Lula está indignado porque dice: ‘Yo soy inocente, quiero que se reconozca mi inocencia, no he cometido ningún delito’. Yo le dije a la presidenta del Supremo Tribunal Federal que Lula es un preso político”, develó el activista por los derechos humanos.
“Lo están sacando porque no quieren que vuelva a ser presidente de Brasil. El gran pecado de Lula es que sus políticas sociales sacaron de la miseria extrema a 36 millones de brasileños y brasileñas”, disparó Pérez Esquivel.
“Más pagamos, más debemos, menos tenemos”
Pérez Esquivel también habló sobre la realidad económica de nuestro país. Enumeró una serie de problemas, destacando que “hay una destrucción de la enseñanza pública” y aseguró: “Un gobierno que no está al servicio del pueblo está en contra del pueblo”. Consideró que la situación económica “es devastadora” y que “no vivimos en una economía real sino en una economía especulativa”.
“Hay tres grandes ejes que si les ponen los números dan siempre el mismo resultado: más pagamos, más debemos, menos tenemos. ¿Cómo revertir esto? El año que viene tenemos elecciones”, cerró.