Pablo Ramos

 

columnista alreves.net.ar

Instrucciones para atravesar el huracán amarillo

Para empezar no se ponga irascible con esos que compraron los boletos de la alegría
pero tampoco se mantenga indiferente ante la fila de ilusos camino al matadero
el deseo que los empuja está enredado en las tripas
y la purga del odio lleva su tiempo
Busque otras miradas que esquiven el pandemonium circense que titila en las pantallas
descubra en los pliegues ocultos de la realidad compartida eso que no se ve pero está presente
Abjure de las generalizaciones superfluas que dopan la capacidad crítica
ni todo es una mierda ni venimos de un paraíso
Mantenga la guardia frente a los guardianes del opresor
pero abra los abrazos a los que más padecen esta situación
No se encierre en sus seguridades personales o en las doctrinas del pasado
salga y respire, camine y observe
la mejor manera de encontrarse es perderse
Resista el embate de la estupidez viralizada
sin caer en el martirio
ni vacunarse con el me importa todo un pepino
Disfrute de la amistad no monogámica, del placer no planificado, del amanecer imprevisto
A la política métale arte
atento pero no rígido
de pie pero no estático
aproveche el poco monte que nos queda para sanear la cabeza
todavía quedan espacios libres que cuidar de los cretinos
No se ahogue con los mates lavados que ceba el conformismo
siga preguntando
hay que jaquear las respuestas del discurso sobrerepetido
no se mire al espejo de la autocomplacencia
si fueramos tan picantes este guiso no sería tan desabrido
A escribir, pintar, sonar, viajar, reír
cada acto simple puede ser subversivo
Conjugue palabras amables sin perder la capacidad de la puteada
gracias, perdon, por favor
al que transita sin pisar los sueños
y al otro lo puede mandar donde peor le quede
Pero no se mande sola con el cascote en la mano
organice la intifada cuando la táctica insugente lo amerite
construya puentes entre el cuore y la razón
para que la mente no se quede sin alma
Nos quieren tristes y escépticos
pero seremos tenaces aunque huérfanos de fe
no nos queda otra
que arremangarse en el diluvio
y remar contra la marea
con la vista fija en el horizonte de lo imposible
Nada de subirse al arca de los salvadores
nada de comprar giladas a los mercaderes del olvido
protejamos a los más chicos sin cortarles las alas
veneremos a los más viejos sin condenarlos a ser estatuas
La cosa está fulera
no sólo en este rincón al sur del planeta
ni sólo en este segundo universal
la humanidad está curtida y sobrevive
no hay destino escrito en esta trama abyecta
Por eso no siga estás instrucciones como si fueran mandamientos
subversione lo que pueda
y habite cada momento sereno y consciente
que la vida es poesía
y nada más…