La mentira es gratis

El gobierno nacional justifica los tarifazos con el argumento de reducir subsidios que habrían sido exorbitantes durante el kirchnerismo, según el relato macrista. Una investigación de Página/12 en base a un informe del FMI demuestra que la Argentina estuvo por debajo de la media mundial entre el 2011 y el 2015.

 lunes, 30-abril-2018

Macri despidió al buque regasificador, que podría volver este año, y anunció mentiras energéticas.


“Los subsidios no son gratis, como nos hicieron creer durante muchos años (…) La energía no es gratis, la energía cuesta porque cuesta producirla, transportarla”, afirmó el Presidente Macri en Vaca Muerta hace una semana, en un intento por justificar los descomunales aumentos de los servicios públicos que implementó su gobierno desde que asumió, y que no piensa corregir.

Como en otros temas, la excusa para el ajuste es el supuesto derroche del populismo kirchnerista, que habría generado un déficit fiscal con su política de subsidios que no dejaría otro camino al actual gobierno que trasladar el costo de la energía a los usuarios y no a las empresas concesionarias, de estrecha relación con el oficialismo y multimillonarias ganancias sin invertir un peso.

Sin embargo, un informe del Fondo Monetario Internacional da por tierra con esa falacia, revelada ayer por el periodista Alfredo Zaiat en Página/12, quien publica datos del organismo financiero que indican que el monto que destinaba en 2015 Argentina subsidiar el consumo de energía estaba por debajo del promedio mundial, y era muy inferior al de países que suelen tomarse como modelo.

Según el documento “How Large Are Global Energy Subsidies?”, el promedio mundial en 2015 era de 640 dólares anuales por habitante, mientras que en Argentina esa cifra llegaba a 413 dólares por habitante, un 35% menos.

Desarmando el discurso de Macri, Peña y Aranguren, entre los países que superaban por lejos al nuestro en materia de subsidios estaban Estados Unidos, con 2177 dólares per cápita por año, República Checa (1669) China (1652), Canadá (1283) Australia (1259) Japón (1240), Israel (1113), Bélgica (909), Alemania (684), Inglaterra (635), Grecia (601), Holanda (595), Nueva Zelanda (550), España (521) y Chile (515). Casi todos países económicamente desarrollados, y que el macrismo pone como ejemplo a seguir.

El informe del FMI calcula que los subsidios energéticos sumaban 5,3 billones de dólares en 2015, 6,5 por ciento del PIB mundial, más que los 4,2 billones de dólares que significaron en 2011. Es decir, en lugar de decrecer los subsidios estatales a la energía, en esos tres años éstos se incrementaban en todo el mundo.