La pata sindical
Los resultados electorales de Cambiemos tuvieron un efecto positivo en el poder financiero, que se trasladó a una baja del dólar y subas en la Bolsa porteña. Pero también parece haber enviado señales a varios caciques sindicales, quienes analizan la suspensión de la movilización convocada para el próximo 22 de agosto, mientras otros la ratifican.
martes, 15-agosto-2017

Hay posturas diferentes en la cúpula sindical sobre las medidas a tomar frente a la situación económica.
Antes de las PASO, el Consejo Directivo de la CGT se juntó para analizar lo que vienen reclamando las bases y los laburantes de pie sin representación gremial, que se agudizó luego del cierre y represión en PepsiCo: alguna acción de protesta impulsada por sus máximos dirigentes para frenar el ajuste macrista y que se implementen medidas para reactivar la economía y la producción.
Aquella vez se juntaron para analizar encuestas, la mayoría con CFK como ganadora en la Provincia de Buenos Aires, no por mucho, pero arriba de Bullrich. Con los resultados puestos salvo en el principal distrito electoral argentino, los dirigentes volverán a reunirse mañana, y dejaron trascender que analizan suspender la movilización que iba a realizarse el 22 de agosto próximo.
“La situación de deterioro no comenzó ahora, viene de antes. Pero hasta ahora se ha agravado, no se ha mejorado. Hay sectores industriales que están atravesando situaciones de cierre, de despidos, de suspensiones, de pérdida de poder adquisitivo. También hay sectores con problemas de trabajo o de trabajo precario. Todo esto no se ha mejorado”.
Andrés Rodríguez, Secretario General de UPCN
“La marcha no es un problema político, nunca fue enfocado así, sino como una exteriorización de una realidad bastante acuciante en vastos sectores de la población”, afirmó el jefe de los estatales nacionales, quien en declaraciones a radio El Mundo admitió que existen “opiniones divergentes” dentro de la central obrera luego de las PASO, y explicó que intentarán “unificar a través de una síntesis que contenga a todos”.
El debate sobre si ser hará o no la marcha fue confirmado también por el titular del gremio de Canillitas, Omar Plaini, quien sostuvo que lo que se discutirá es “la conveniencia o no” de concretar esa protesta o bien dar inicio “a un plan de lucha más amplio”. En tanto, Juan Carlos Schmid, integrante del triunvirato de la CGT, salió al cruce de esas versiones y aseguró que “la probabilidad de que se haga la movilización es total, de un 100 por ciento”, lo que expresa la falta de unidad del arco sindical frente a las políticas oficiales.
“La situación de deterioro no comenzó ahora, viene de antes. Pero hasta ahora se ha agravado, no se ha mejorado. Hay sectores industriales que están atravesando situaciones de cierre, de despidos, de suspensiones, de pérdida de poder adquisitivo. También hay sectores con problemas de trabajo o de trabajo precario. Todo esto no se ha mejorado”, añadió Rodríguez, quien a pesar de este cuadro desolador sobre el mundo del trabajo, aceptó que la movilización no está confirmada. De suspenderse, la decisión no haría más que ratificar la “sintonía fina” de muchos de los popes sindicales con el gobierno de Macri, y una preocupante indiferencia hacia quienes dicen representar y no la están pasando nada bien.