La diabetes, el sobrepeso y la obesidad están cada vez más relacionados con los ultra procesados desbordantes de azúcares, sal, grasas totales, grasas saturadas y grasas trans. Eso es lo que pretende advertir la Ley de etiquetado frontal, y eso es exactamente lo
que los pulpos de la industria de la alimentación quieren impedir que sepa.