“El cambio o el populismo”
Mauricio Macri habló desde Dubai sobre las elecciones de octubre. Dijo que "tenemos que confirmar la vocación de cambio" para que empiece la tan prometida lluvia de inversiones. Sobre la acusación contra su amigo y funcionario Gustavo Arribas, dijo que "no le preocupa para nada".
lunes, 15-mayo-2017

El presidente se empieza a meter de lleno en la campaña y se refirió a lo que, según él, está en juego en las elecciones. “Acá en octubre vamos a volver a discutir si el cambio que hemos emprendido es algo en lo que creemos y en lo que estamos dispuestos a trabajar en el largo plazo o si queremos volver al populismo y al aislamiento”, dijo Macri.
En declaraciones al diario Clarín, vinculó el resultado electoral con la posibilidad de que por fin empiece la lluvia de inversiones. Remarcó que, para que eso suceda, tienen que haber “acuerdos de largo plazo y reglas claras”. En diccionarios como el macrista, eso se traduce generalmente en un campo laboral más flexibilizado, achicamiento de los salarios y beneficios impositivos para los inversores. Macri aseguró que crear al marco para la llegada de inversiones “lo garantiza seguir con las reformas que hemos emprendido”.
“Acá en octubre vamos a volver a discutir si el cambio que hemos emprendido es algo en lo que creemos y en lo que estamos dispuestos a trabajar en el largo plazo o si queremos volver al populismo y al aislamiento”
Mauricio Macri
Respecto al rumbo económico, mencionó que “Argentina va a crecer después de cinco años que no crecía”. De todos modos, indicó que “para que los resultados del crecimiento alcancen a toda la población hay que crecer muchos años seguido, entonces hay mucha gente que todavía no percibe esta mejora. Yo me voy a dormir todas las noches pensando en la cantidad de gente que todavía no percibe las mejoras”, en un concepto que parece una teoría del derrame versión 2017. Hasta ahora, esas mejoras las perciben fuertemente el sector financiero, los grandes productores del agro y algunos sectores empresarios cercanos al gobierno.
Por otra parte, Macri no se animó a hacer pronósticos sobre el tema inflación: “no me gusta hacer pronósticos. Tenemos que llegar a bajarla a un dígito para 2019. Ese es el compromiso”. De todos modos, confió en “una baja importante de la inflación para el segundo semestre, ya que no tenemos aumento de tarifas”. Esta idea contrasta con la de muchos opositores que aseguran que después de octubre se viene un tarifazo. El presidente intentó despegarse de lo que puso en el presupuesto y le tiró una pesada mochila a Sturzenegger: “el Banco Central sigue siendo optimista (respecto a la meta del 17 %). Es el responsable primario de la inflación”.
Caso Arribas
La situación de Arribas se complicó con la declaración del arrepentido Meirelles, quien aseguró que el amigo del presidente y titular de la AFI recibió 850 mil dólares. Consultado respecto a la situación de Arribas, Macri dijo: “No me preocupa para nada. La información que ha presentado Arribas está clara. La pregunta es quién es Meirelles. Esa es la pregunta”, cerró.