“Más gente revolviendo basura para comer”

Más pibes que piden changas en las casitas que están construyendo en Campo de la Ribera. Más familias pidiendo para comer. Más demanda de todo. Y personas no habituadas a seleccionar deshechos buscando comida en el basural de la Costanera. Lo que ve a diario el cura Oberlin.

 jueves, 30-agosto-2018

El sacerdote se mueve en zonas estructuralmente pobres, pero ahora advierte mayor demanda de alimentos y trabajo.


El sacerdote Mariano Oberlin, de barrio Maldonado, conoce de cerca la realidad de los sectores más vulnerables de la sociedad y de los jóvenes en particular, porque con ellos trabaja a diario en la prevención y tratamiento de adicciones.

En diálogo con el portal Al Revés, dijo que las barriadas por donde él se mueve “siempre fueron pobres” pero que en los últimos meses se pueden detectar algunas situaciones que hablan de un mayor deterioro aún de la vida cotidiana.

“Hay movimientos que no sé si son por la pobreza creciente o porque nuestra obra se ha visibilizado más”, arrancó. “Todos los días vienen chicos a pedirnos changas en la obra, todos los días vienen chicos a pedirnos una naranja y hay más familias pidiendo comida”, señaló el cura, que encabeza una fundación que está construyendo casas para los chicos en rehabilitación en barrio Campo de la Ribera.

“Pero hay un dato objetivo, y es que en el basural que hay en la Costanera -la Costanera acá siepre ha sido un gran basural- veo desde el año pasado más familias con chicos buscando comida entre la basura. No es el seleccionador profesional, que busca una cama vieja, un sillón o algo de ese tipo. Son familias que revuelven la basura y buscan para comer, y se nota que no son personas habituadas a trabajar con la basura”, indicó.

El sacerdote relató que, en lo que hace a la construcción de las casitas, el impacto de la devaluación se ha sentido. “El lunes pasado fui buscar chapas con el dolar a 29 o 30 pesos, y volví al otro día y ya no me alcanzaba la plata porque el dólar había subido”, dijo. “En las chapas y los metales para la obra, el impacto de la suba del dólar es automático”, explicó. “No estamos hablando de porcellanato, hablamos de chapas, lo más básico para un casita”, remarcó.

“En los sectores vulnerables, el efecto de la devaluacion es drástico”, finalizó.