Mejor no hables de ciertas cosas
Los 43 días en Europa parecían dar cuenta de su alejamiento de la campaña electoral. Sin embargo, desde que regresó al país, busca recuperar protagonismo a través de declaraciones que solo logran echar tierra a su propio espacio. Mientras en el oficialismo celebran sus barrabasadas, desde al ala dura de Juntos por el Cambio aclaran que Mauricio Macri “no es un lastre”.
miércoles, 18-agosto-2021

Mauricio Macri se entrometió en la campaña electoral sin adaptarse a la agenda electoral de Juntos por el Cambio.
Además de ser apodado “domador de reposeras”, ahora podría ser comparado con un “collar de melones”. La esperanza de que Mauricio Macri permaneciera en Europa durante gran parte de la campaña electoral se derrumbó hace una semana cuando regresó al país luego de estar supuestamente “varado” en el extranjero.
Los 43 días en el viejo continente parecían dar cuenta de su resignación y su derrota en el armado de las listas frente a “las palomas”. Durante su estadía europea, compartió poco contenido político en sus redes: repudió “el dolor y la vergüenza” que manifestó Alberto Fernández cuando se conoció que su gobierno (Cambiemos) envió armas a Bolivia; se sumó al pedido de “SOS” (sic) en apoyo al pueblo cubano; y publicó una foto del cabello de Diego “el colo” Santilli acompañado por la leyenda “EsJuntos” como una manera de no quedar fuera de la campaña.
No obstante, su arribo significó un pelotazo en contra para Juntos por el Cambio. Desde que volvió a Argentina, no hizo otra cosa que restar puntos a su espacio político y desviar la atención de los temas que Juntos por el Cambio tenía en su agenda electoral. Poco oportuno, incumplió – una vez más – con el aislamiento que el gobierno nacional impone a los viajeros, justo cuando el foco mediático estaba dirigido hacia la foto del festejo de cumpleaños de Fabiola Yáñez en plena cuarentena. “Macri se tuvo que mudar y no informó el nuevo domicilio”, lo defendió su abogado, Pablo Lanusse.
Imputado en la causa por contrabando agravado por el envío de municiones a Bolivia, el ex presidente niega todo y arremete contra el kirchnerismo.
Esta semana, el ex mandatario brindó una entrevista a TN en donde buscó recuperar protagonismo recordando su desastrosa gestión. Recurriendo a un pasado que muchos prefieren olvidar, Mauricio Macri realizó declaraciones que echaron tierra a su propio espacio. Entre las barrabasadas que escupió, la más grave fue la defensa del millonario endeudamiento con el FMI.
“El Fondo no vino a hacer un negocio. Vino a ayudar a la Argentina”, expresó. Según su particular lectura, el motivo del crédito era “renovar las deudas que estaban venciendo”. “Cuando uno mira la deuda con el crédito del fondo y hasta el día que me fui, es la misma deuda”, señaló a pesar de que los números dicen lo contrario. De acuerdo a un artículo de Página 12, la deuda externa pasó del 36,5% del PBI en el 2016, a representar el 70% del producto anual en solo 3 años.
Ensimismado, hoy el fundador del Pro habló por Cadena 3, y confirmó que – sin querer queriendo – milita para el oficialismo. De esta manera, se encargó de responder a la agenda política que instaló el Frente de Todos y, puntualmente, Cristina Fernández. Calificó al kirchnerismo como una versión “salvaje y antidemocrática” y explicó que el “país de morondanga” al que hizo referencia la vicepresidenta es aquel que es “confiable y creíble”. También negó el lawfare y se autopercibió como un perseguido judicial por la causa del Correo.
Si bien representantes de Juntos por el Cambio como Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal optan por ignorar al ex presidente y no confrontar explícitamente, es evidente que prefieren su silencio. Desde la UCR expresaron de manera más abierta su posición: Alfredo Cornejo advirtió que no iba a ser conveniente la presencia de Mauricio Macri en la campaña electoral, mientras que el precandidato Facundo Manes lo ninguneó al indicar que el país “tiene debates más importantes que dar”.
Antes de su viaje a Europa, Mauricio Macri mantuvo fuertes cruces con Horario Rodríguez Larreta por las precandidaturas. Perdió la pulseada frente al jefe de gobierno de CABA.
A pesar de ello, Mauricio Macri participará de las campañas electorales en algunas localidades del conurbano – en las pocas en donde tiene buena imagen – y también en provincias como Córdoba y Santa Fe. Mientras tanto, dirigentes del Frente de Todos, desnudan la estrategia de Juntos por el Cambio y activan la memoria del pueblo para recordar los 4 años de Cambiemos.
“Vemos que quienes pretenden construir la alternancia de gobierno lo único que hacen es esconder al señor que fracasó y cruzar candidatos de un lado a otro para ver si pueden disimular ese fracaso”, sostuvo el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. Por su parte, desde el ala dura de Juntos por el Cambio, salieron a aclarar que Mauricio Macri no es una piedra en el zapato. “No es un lastre, de ninguna manera”, afirmó Néstor Grindetti, intendente de Lanús. No aclares que oscurece y mejor no hablar de ciertas cosas.