Metal sin salida
Las exportaciones del sector metalúrgico cayeron el 5,6% en el primer trimestre del año y el 46% de las empresas debieron reducir su personal.
jueves, 13-junio-2019
La industria metalúrgica acusó recibo de la recesión con una caída brusca de su producción y de las exportaciones.
Durante el primer trimestre del año, las exportaciones de la industria metalúrgica cayeron un 5,6% y el sector acusa una de las depresiones más agudas de los últimos años.
De acuerdo a datos de un informe de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la Argentina (Adimra), las importaciones también sufrieron un impacto profundo, con una caída del 30,9% del volumen de las operaciones, marcada por un descenso en la cantidad de productos que ingresaron (-24%) y por la variación en los precios (-9).
Sin embargo, el único rubro de importaciones vinculadas a la industria metalúrgica que mostró números positivos fue el de equipamientos eléctricos y electrónicos, que aumentaron un 1,8% con respecto al mismo período del año anterior.
El índice se anota dentro de una medición sobre el total de las exportaciones del país durante los primeros tres meses del año, que cayeron un 8,4%, por un total de u$s76,8 millones, mientras que las importaciones marcaron un pico negativo de 31,3%, con u$s1.246 millones negociados.
Mientras tanto, en el sector productivo, los números sobre exportaciones e importaciones expresan lo que sucede puertas adentro en las industrias y allí se recistró en abril una caída del 5,9% interanual, con un descenso del empleo de la capacidad productiva que llegó al 51,9%.
La producción de carrocerías, remolques y semirremolques cayó un 20,9%), mientras que la fundición bajó un 16,2%, las autopartes un 12,5%, los bienes de capital el 7,6%, los equipos y aparatos eléctricos el 6,4%, otros productos de metal un 6,7%, y el equipamiento médico el 0,4%.
Como consecuencia, los empresarios implementaron un programa de ajuste de costos y el 46% aseguró que debió reducir su planta de recursos humanos o disminuir la horas de trabajo por obrero. El nivel de empleo bajó un 1,9% y el 37% de las empresas redujeron las horas extras de su planta de empleados, mientras que el 12% de las industrias aplicó mermas en la carga horaria por jornada laboral.
Otro indicador de la crisis en el sector fue la aplicación al Programa de Recuperación Productiva (Repro) o el ingreso en procesos preventivos de crisis. Se estima que el 9% del empresariado metalúrgico solicitó ser parta de Repro.