Tanto alumnxs, como xadres y directivos del Instituto Divina Providencia, enfrentan una pesadilla ya vivenciada en el 2015.
La lucha que tanto esfuerzo les costó por aquel entonces parece de nada haberles servido.
El ministerio de Educación anunció que no le otorgará títulos con validez nacional a colegios de modalidad especial para personas discapacitadas.
A principios de año, la escuela Instituto Divina Providencia de modalidad especial fue notificada de que a partir del presente ciclo lectivo 2022 a lxs egresadxs no se les iba a entregar más el papel moneda que le otorgaba la validez nacional al Título Bachiller del Secundario.
“La nueva resolución 1825/2019 busca sacar la modalidad especial. Nuestra escuela va a quedar como un complemento y luchamos para que este tipo de educación siga siendo una opción”.
Laura Luzardo, vocera de los xadres del Instituto.
Es decir que la provincia no reconocerá los saberes y esfuerzos. “A nuestros hijxs se los sigue discriminando dándoles títulos de alcance provincial, siendo totalmente indiferentes a las necesidades derivadas de su discapacidad”, dice María Alejandra Ayala, mamá de una alumna de 5to años que asiste al Instituto.
Falsas promesas.
Esta situación ya la habían vivenciado en el 2015 con la resolución 0081. Sin embargo no prosperó.
Al igual que la resolución actual, tenía como fin dejar sin efecto el otorgamiento del título con validez nacional a lxs alumnxs con discapacidad. Pero fue derogada gracias a la lucha de los xadres, alumnxs y de la institución.
Aquel año, el ministro de educación de la Provincia de Córdoba, Walter Grahovac, acompañado por la entonces Vicegobernadora Alicia Pregno, visitó el instituto Divina Providencia reconociendo su error. Y se comprometía en su discurso a defender la modalidad en el Consejo Federal de Educación.
Siete años después vuelve a vulnerar los derechos de lxs alumnxs con discapacidad.
El ataque a la alternativa de la modalidad especial como opción educativa, se viene dando en Córdoba desde la prohibición del Nivel Inicial.
Políticas destinadas a sostener la permanencia de lxs alumnxs en la escuela común, quitándoles el derecho a los xadres de elegir el espacio educativo para las necesidades pedagógicas y emocionales de sus hijxs, obligándolxs a una sola alternativa educativa.
“No todos los niños se integran a las escuelas comunes, tiene que haber diversidad de opinión. No se debe empujar a lxs chicxs a la escuela común y que se adapten como puedan”, dice Laura.
El Ministerio de Educación sostiene que su objetivo es integrar a todxs lxs estudiantes de la provincia a colegios comunes con el acompañamiento de maestras integradoras.
“La integración se pone como una palabra modelo pero no se está llevando a cabo”.
Laura Luzardo
“Muchas veces lxs maestrxs o los edificios no están preparados para recibir alumnos con discapacidad”, cuenta María Alejandra.
Por otra parte, para lxs padres, brindarles un título con validez provincial limitaría a lxs estudiantes que se trasladen de provincia a ingresar a estudios superiores, quitándoles posibilidades laborales.
Coinciden en que sus niñxs ya han asistido a escuelas “comunes” y han sufrido bullying y maltrato. Reclaman que las escuelas de modalidad especial se multipliquen, no que se resten.
Actualmente en la ciudad de Córdoba solo existen 2 instituciones de modalidad especial funcionando.
Desde el Ministerio de Educación se les ha ofrecido una titulación para los 3 años que quedaron en medio de las resoluciones. “Nosotrxs queremos que los ninxs que vengan estén tituladxs”, dice María Alejandra.
Piden que se reabran el primario y las salas de 5 años, cerradas en el 2015 y exigen una resolución definitiva.
Como primera medida, se reunieron con la inspectora de la Modalidad Especial, Sonia Ghirardo, de la D.G.I.P.E. quien no les brindó ninguna respuesta fehaciente.
Aún esperan una respuesta de por qué, qué o quienes hicieron que en estos 7 años el ministro de Educación cambiara su opinión y rompiendo su promesa.