No es sensación, es menos poder adquisitivo
Es oficial: al ajuste lo pagan los asalariados. El poder de compra de los sueldos cayó hasta mayo. Falta el impacto de la corrida del dólar y del fuerte incremento de los precios de junio. Trabajadores del Estado y no registrados recibieron la peor parte. Lo dijo Macri en Córdoba: el Estado va a pagar "lo que pueda".
miércoles, 1-agosto-2018

Registrados, no registrados y estatales: todos perdieron frente a la inflación.
Si el asalariado que lee esto observa que la plata no le alcanza y que a fin de mes al sueldo le sobran muchos días, tiene que saber que no es una sensación: es una fuerte y oficial pérdida de poder adquisitivo. Según el Indice de Salarios del Indec, la pérdida es de 3,6 puntos de poder de compra en los primeros cinco meses del año. Las paritarias perdieron con la inflación 8,3% a 11,9% en el perídodo enero-mayo. Todavía falta computar la fuertísima suba del IPC de junio, del 3,7%, y de julio (seguramente algo más bajo), que se produjeron con las paritarias ya cerradas en muchos gremios y, en varios casos, sin cláusulas gatillo.
Si se enfoca en el sector público, la pérdida llega al 7,2%. Y en los trabajadores no registrados, al 5,2%. Los empleados que cobran de fondos publicos van a continuar siendo blancos de fuertes ajustes. El lunes, en Córdoba, Mauricio Macri adelantó que el Estado “pagará lo que pueda” a sus trabajadores, en el marco del ajuste de 300 mil millones que exige el FMI. Todas las consultoras señalan que gran parte del recorte se hará en el sector, y de hecho la rebaja de 500 mil asignaciones familiares va en ese sentido.
El economista Luis Rinaldi, docente de la UNC, ejemplificó la situación con la oferta que el Ministerio de Educación le hizo a los trabajadores de las universidades: 5% de aumento este año y el restante 15% para el año que vien. La inflación anual para 2018 seguramente superará el 30%.
“Esto es parte de la política de ajuste que se está implementando. Inflación tuvimos siempre, también con el kirchnerismo, lo importante era que hasta 2014 las paritarias le ganaban a los precios”, explicó Rinaldi al portal Al Revés. “Aquello de Samuelson que los precios van por el ascensor y los salarios por la escalera fue invertido: en la actualidad los precios van por el ascensor y hay convenios que no tienen ni escalera, como es el caso de los docentes universitarios, que hace casi un año que no se ajustan”, destacó.
“El ajuste lo están pagando los asalariados y los sectores autónomos pesificados. Esto típicamente ha ocurrido en el país, salvo en algunas excepciones como gobiernos peronistas. Pero Argentina tiene una inflación estructural, hemos tenido décadas de tres dígitos y una mega inflación conocida como la híper. Siempre mantenemos problemas estructurales, hasta tanto no se remuevan las causas que tienen que ver con la concentración, extranjerización, oligopolización, la cartelización de precios. Si dejás que el precio del aluminio te lo fije (Paolo) Rocca (dueño de Techint), estamos en un problema, que la cerveza la fijen dos embotelladoras, o al precio del combustible lo fijen tres petroleras, también”, indicó el economista.