Reconciliarse, nunca, olvidar, jamás

Organizaciones de derechos humanos salieron al cruce de la idea del episcopado de llevar adelante un plan para reconciliar a los asesinos de la dictadura con los familiares de víctimas del terrorismo de Estado.

 miércoles, 3-mayo-2017

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La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) pretende juntar a víctimas y victimarios de la última dictadura militar para lograr una “reconciliación” por lo sucedido en los años más oscruos de la Argentina. Como era de esperarse, la iniciativa causó un gran rechazo en los principales organisimos de DDHH.

Abuelas de Plaza de Mayo expresó “su profunda preocupación” y su titular, Estela de Carlotto, manifestó que lo único que hace esta convocatoria “es herir susceptibilidades”. “Acá no hay odio, no hay rencor, ni revancha. Tuvimos la paciencia de esperar 40 años. Se cometió un genocidio y se declaró delito de lesa humanidad. Hay que buscar la reparación por medio de la justicia y del respeto a la verdad absoluta”, completó Carlotto.

“Hay que buscar la reparación por medio de la justicia y del respeto a la verdad”.

Estela de Carlotto, Abuelas de Plaza de Mayo

Estela de Carlotto criticó al Arozbispado alreves.net.ar

Estela de Carlotto criticó al Arozbispado

Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, dijo que la iniciativa es “hipócrita”. “Que digan qué averiguaron, cómo se movieron, qué trámites hicieron para parar el horror; eso queremos”, disparó Cortiñas, para quien “no puede haber una reconciliación cuando no hay arrepentimientos”.

Las reuniones con víctimas y familiares de victimarios fueron confirmadas por la CEA, como parte de las actividades que los obispos realizarán durante su 113° Asamblea Plenaria que comenzará mañana en la localidad de Pilar. Será el puntapié de inicio de “un itinerario de trabajo sobre el tema de la reconciliación en el marco de la cultura del encuentro”.

“¿Ahora vienen a pedir reconciliación?”, se preguntó Cortiñas durante una entrevista por radio Blue y acusó a la Iglesia de ser “partícipe del terrorismo de Estado”. La reconciliación asoma en el horizonte como imposible, porque esta grieta es en realidad una cicatriz abierta en base a torturas y asesinatos hasta ahora no reparada.