Salvavidas de plomo

En medio de la disparada del dólar, fuga de capitales e incertidumbre económica, el Presidente Macri anunció que pedirá ayuda financiera al Fondo Monetario Internacional, reavivando todos los fantasmas que la sociedad argentina vivió hace 17 años con el Megacanje y el corralito. No se hizo cargo del endeudamiento sistemático de su gobierno y volvió a culpar al kirchnerismo de la situación.

 martes, 8-mayo-2018

Con una mano firma para echar personal del Estado, con la otra designa cargos políticos.


Buscando disimular la absoluta debilidad de la noticia con sonrisas forzadas, el Presiente Macri anunció que pedirá asistencia financiera al Fondo Monetario Internacional para poder seguir respirando. Lo hizo en un video grabado en Casa Rosada luego de que el dólar llegara casi a los 24 pesos. “Vamos a comenzar hoy mismo a trabajar en un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”, confirmó con cara de póker. “Hace unos minutos acabo de hablar con Crhistine Lagarde” dijo Macri, como si estuviera anunciando lo que para millones de argentinos no fuera un deja vu que creyeron haber sepultado.

ANUNCIO DEL PRESIDENTE DESDE CASA ROSADA

Posted by Mauricio Macri on Tuesday, May 8, 2018

“Somos uno de los países del mundo que más depende del financiamiento externo”, reconoció el jefe de uno de los gobiernos récord en endeudamiento en el menor tiempo posible. “Esta política depende mucho del financiamiento externo. Durante los dos primeros años contamos con condiciones muy favorables, pero eso está cambiando. Están subiendo las tasas de interés, sube el petróleo y otras variables que no manejamos. Somos uno de los países del mundo que más dependemos del financiamiento externo”, confesó Macri.

“De manera preventiva, he decido iniciar conversaciones con el FMI para que nos otorgue una línea de crédito financiero. Vamos a trabajar hoy mismo a en un acuerdo para lograr mayor respaldo para enfrentar el nuevo escenario y evitar crisis”.

Siguiendo a rajatabla la doctrina Durán Barba, el Presidente buscó transmitir certezas, confianza. Su cara decía lo contrario. Mientras pronunciaba la palabra “ayuda”, “Fondo”, a millones le corría un frío por la espalda, como si el 2001 estuviera a la vuelta de la esquina.