“Se terminó la obra de teatro y la realidad golpea la puerta”
El titular de La Bancaria de Córdoba, Raúl Ferro consideró positivo lo que está sucediendo con la CGT porque "más que una ruptura se transparenta hacia dónde va el movimiento obrero". Para el periodista especializado Jorge Duarte "a Moyano no le hace falta ser secretario general de la CGT para ser el líder" y aseguró que "es quien toma las decisiones".
martes, 6-febrero-2018

Raúl Ferro, de La Bancaria, fue crítico con la CGT por sus decisiones pero promovió la unidad.
El sindicalismo argentino se encuentra ante un momento clave, de los más álgidos de su historia reciente. La figura de Hugo Moyano volvió a erigirse como la más fuerte y la más confrontativa contra el gobierno, mientras “los Gordos” y los independientes se muestran cerca del gobierno. “Más que ruptura es una cosa buena que se transparente y empecemos a ver hacia dónde va el moivmiento obrero con este gobierno”, dijo Raúl Ferro, secretario general de La Bancaria de Córdoba.
“Hubo muchos romances, llegaron al altar y no estaban los anillos”, dijo el dirigente, con una carga de ironía. Expresó que la opinión pública empieza a abrir los ojos ante una economía cuesta arriba: “El humor social se va calentando, los salarios van a la baja, la inflación es incontenible. Se terminó la obra de teatro, la realidad comienza a golpear las puertas, entra a tu casa: tenés una boleta de agua, de luz, bajos salarios“.
Respecto a los casos de corrupción que salpican al sindicalismo, Ferro apuntó que “está bien que se limpien un poco las instituciones y que sigamos adelante los que podamos pasar por los carpetazos”. Además, criticó las posturas de la CGT el año pasado: “La CGT ha tenido mucho que ver. Yo entiendo la gobernabilidad pero no se puede estar de los dos lados del mostrador. El que esté sucio que pague las consecuencias. Pero el gobierno no apunta exclusivamente a los dirigentes que se enriquecen sino a los que son antimacristas”.
Moyano, con el camión a toda marcha
El líder de Camioneros se reinventó: de aliado testimonial del macrismo cruzó de vereda y ahora su claxon opositor suena fuerte. “Necesitamos tener referencias de resistencia. Es bienvenido todo lo que sirva para avanzar, resistir y unir. Moyano es un mix: es un buen dirigente, de resistencia y a la vez es un dirigente comprometido con una serie de causas judiciales”, dijo Ferro.
Jorge Duarte, periodista especializado en temas sindicales, apuntó que “el regreso de Moyano lo hace reasumir el liderazgo y para eso no le hace falta ser secretario general de la CGT”. Consideró que hubo “una crisis de representación” en la central obrera y que “Moyano es el virtual líder, quien toma las decisiones”. En un repaso por los vaivenes de la relacion gobierno-sindicatos, Duarte recordó que en épocas de año nuevo, Hugo Moyano le pidió a su hijo Pablo -el dirigente más combativo- que se fuera de vacaciones para tratar de recomponer las relaciones con el gobierno. No lo logró y tuvo que reinventarse. El 22-F podría funcionar como su ‘acto de asunción’ como líder sin títulos.