Socios del desierto

Desde el año 2016, los vecinos de Saldán mantienen una férrea defensa de la Reserva Natural Inchín y acusan al Municipio de ser socio del sector desarrollista y minero. Los habitantes de la localidad buscan frenar la construcción de una Planta de Hormigón en la zona y la instalación de una planta de residuos cloacales que contaminaría el Río Suquía.

 martes, 29-septiembre-2020

Alrededor del 80% de las tierras de la Reserva Saldán Inchín están en manos privadas, lo que habilita el avance de proyectos que atentan contra el ambiente, en connivencia con el Estado.


Si bien hay una ordenanza que preserva algunas zonas de la provincia bajo la figura del “reservas naturales”, muchas no fueron reglamentadas en la práctica, habilitando el avance empresarial sobre estas áreas naturales. Tal es el caso de la Reserva Hídrica Inchín, en donde más del 80% de las tierras pertenecen al sector privado, y sólo 30 hectáreas corresponden a la Municipalidad de Saldán. Ante esta inmensa contradicción, lxs vecinxs de la localidad luchan desde el año 2016 contra un Estado que funciona como socio de los proyectos que buscan instalarse en la zona.

A principio de año, lxs habitantes de la localidad realizaron un acampe a la vera de la Ruta E64 durante dos meses, para dar a conocer y manifestar su rechazo a los emprendimientos en el interior de la Reserva Natural. De acuerdo a lo que explicó Pablo Ramallo a Al Revés, los reclamos han logrado frenar el programa Lo Tengo – un plan de 92 viviendas del gobierno provincial – y en marzo, a través de una medida cautelar, consiguieron detener el avance de una Planta de Hormigón en un sector del área natural que pertenece a la empresa Minetti. La disposición judicial permanece en despacho y, hasta el momento, establece “la suspensión de tala de árboles o de cualquier acto que signifique la modificación o alteración de la geografía y/o topografía natural del lugar”.

Otro de los puntos que preocupa a los integrantes de lxs asambleístxs es el Plan de Saneamiento de Sierras Chicas del Gobierno de la Provincia. Más allá de la necesidad de contar con cloacas en el corredor para evitar la contaminación de las napas de agua, la iniciativa comprende tres plantas de bombeo dentro del área privada de la Reserva, cuyos residuos desembocarían en la Laguna Azul y contaminarían el Río Suquía. “Nosotros estuvimos averiguando y esas cloacas no son las adecuadas. Hay otras que son mejor, de tercera generación, que realizan un proceso similar al de una planta potabilizadora de agua”, detalló Pablo Ramallo. “Queremos que se frene, pero está difícil. Acá el privado – Minetti – cede terreno a la Municipalidad para que haga ese proyecto”, remarcó.

La Reserva Saldán Inchín forma parte de una zona roja, según estipula la Ley de Bosques. Además de que para lxs vecinxs “no se puede tocar la reserva”, advierten por la contaminación del río. “No hay monte para contener el agua y se va a inundar Córdoba”, alertan. Por ese motivo, exigen la expropiación de las tierras que están en manos privadas, la relocalización de las obras de la planta depuradora de líquidos cloacales para preservar el área y el fin del desmonte producto de la especulación inmobiliaria.