“Temo por la vida de Lula”
Dilma Rousseff estuvo en Argentina y advirtió por la comida y el agua que ingiere el máximo líder político de Brasil. No dudó en afirmar que su salida del gobierno fue a partir de un golpe de Estado y que Lula va a volver a ser el presidente de su país. El periodista Darío Pignotti confirmó este clima de persecución contra el líder del PT.
miércoles, 2-mayo-2018

Dilma estuvo en Buenos Aires y advirtió del hostigamiento contra Lula.
Rousseff advirtió por “la comida que ingiere y el agua que toma” Lula, a quien además le impidieron que lo visitara su médico en la celda donde permanece detenido en la policía federal de Curitiba.
En el marco de la presentación de su libro en Buenos Aires, “Lula, la verdad vencerá en un acto continental por la libertad del líder preso”, Dilma aseguró que “con Lula están utilizando la justicia del enemigo”, pero igual aseguró que “libre o preso, Lula va a ser presidente de Brasil”.
Destituida sin pruebas por un golpe parlamentario, Rousseff denunció que “Lula, incluso ahora como preso político, porque es un preso político, encuentra fuerzas en la relación con el pueblo brasileño. Por eso hacemos caravanas, ciudad por ciudad, que superan el silencio nefasto de los grandes medios de comunicación”.
Aseguró que el golpe que la sacó del gobierno “ha sido derrotado políticamente por el pueblo brasilero” y que la única salida que le queda a las grandes mayorías es “resistir, resistir y resistir”. Por e so confirmó que Lula va a volver a ser candidato de su partido cuando se anuncien las candidaturas, en agosto próximo.
La derecha muestra los pelos
Darío Pignotti, corresponsal argentino en Brasil confirmó en diálogo con Nada del Otro Mundo la persecución política que sufre Lula en Curitiba: “El presidente del sindicatos de policías de Paraná, el estado donde está detenido Lula, pidió que sea sacado de ahí y lo justificó haciendo comentarios políticos e ideológicos en su contra. Luego se supo que es activista del partido de Jair Bolsonaro”, en referencia al ex militar y político de la derecha que quiere ser presidente.
“La propia alcaidía de Curitivba, en manos de la ultraderecha, también solicitó que Lula sea sacado de esa ciudad por los trastornos que causa su detención”, reveló Pignotti.
En este sentido, advirtió que “hay un clima político que hace considerar la verosimilitud de las plabras de Dilma, que no es de hacer declaraciones exageradas, es una dirigente muy medida”.
Condenado sin pruebas
El entrevistado advirtió que lo que hoy padece Lula “nace de la propia naturaleza del proceso que lo llevó a la cárcel: el tiempo en que fue procesado y encarcelado fue un tercio de lo que le llevó a la justicia inculpar al resto de los implicados en el LavaJato”.
“El juez Moro lo encarceló de una manera inusitada, e incluso en su propia sentencia reconoce que no llegó a demostrar la culpabilidad de Lula. Aunque con otras palabras, dijo que tiene la convicción de que sí fue culpable de haber recibido una propiedad en el litoral de San Pablo, pero es un proeceso penal sin pruebas”.