La Justicia y un trampolín para Barrionuevo
La jueza María Servini de Cubría dispuso la intervención del Partido Justicialista Nacional en un fallo plagado de consideraciones políticas. Designó como interventor a Luis Barrionuevo. Fue por un amparo presentado por Carlos Acuña, uno de los laderos del gastronómico. José Luis Gioja señaló que es un paso más en “la judicialización de la política”.
martes, 10-abril-2018

Luis Barrionuevo fue designado como interventor por la jueza María Servini de Cubría.
Una jornada de alta tensión se vivió en la sede del Partido Justicialista Nacional, luego de que la jueza María Servini de Cubría dispusiera su intervención, a pedido del titular del sindicato de estaciones de servicio, el barrionuevista Carlos Acuña. La magistrada designó al propio Luis Barrionuevo como interventor.
El gastronómico, apenas conocida la noticia, se hizo presente en la sede de la calle Matheu y allí se dio inicio a una jornada de tensiones. Militantes de la Juventud Peronista intentaron resistir contra la llegada de ‘los muchachos barrionuevistas’, un grupo mucho más numeroso. Finalmente, ingresaron al local partidario Barrionuevo y Acuña. Allí hubo una reunión entre Gioja y el gastronómico, aunque luego el sindicalista salió a decir públicamente que el sanjuanino “se encerró en su oficina” y que iba a proceder a “pedir el desalojo”.
Por su parte, Gioja publicó en sus redes sociales un breve comunicado en el que señala que la intervención “carece de todo sustento legal” y que es un hecho que “tiene que ver con la judicialización de la política y atenta contra la democracia”. “La decisión tiene por objeto proscribir una vez más al peronismo y dejar al gobierno sin su principal partido de oposición”, sostuvo. Además, adelantó que van a apelar el fallo de Servini de Cubría. Barrionuevo se refirió a esto y aseguró: “El interventor soy yo. Ellos están encaprichados, quieren apelar. Que apelen cuando quieran”.
PLENA JUDICIALIZACIÓN DE LA POLÍTICA pic.twitter.com/q4nP0eucrD
— José Luis Gioja (@joseluisgioja) 10 de abril de 2018
Finalmente, Barrionuevo se retiró del local partidario, donde como cereza de la torta sus custodios agredieron con inusitada violencia a un camarógrafo de la Agencia Télam.
Por otra parte, llama la atención de manera ineludible el fallo de la jueza. Su lectura recuerda más a un artículo periodístico de opinión política con un repaso histórico, no despojado de subjetividades, del peronismo (amén de numerosos errores ortográficos y sintácticos). “La derrota en los comicios presidenciales como así también el fracaso en el acto electoral para elegir gobernador en el distrito más grande del país, han provocado una crisis en la conducción partidaria difícil de superar”, opinó Servini de Cubría.
En su argumentación, la magistrada aludió a que “la historia del peronismo se encuentra plagada tanto de lealtades como de traiciones y las heridas que dejan las luchas intestinas provocan una sangría difícil de curar”. “Resulta razonable acoger la solicitud de Interevención Judicial, a fin de plasmar en la vida partidaria, aquella máxima que nos impone ‘…organizar republicanamente los partidos para organizar republicanamente la Nación’”, concluyó Servini de Cubría.
En su resolución, la jueza dispone que Luis Barrionuevo “tendrá como misión la de producir los actos necesarios tendientes a la normalización partidaria”, además de hacer un inventario de bienes y un informe de la situación financiera del partido. Por último, se designará una Comisión Asesora del Interventor que estará integrada por tres miembros, los cuales serán designados por la jueza en acuerdo con Barrionuevo.