Tributo a los ricos
La reforma impositiva desembarca hoy en el Congreso para su debate. El gobierno busca tenerla aprobada para el inicio de sesiones ordinarias 2018. El proyecto planea 20.000 millones de pesos más para el Fondo del Conurbano de provincia de Buenos Aires.
lunes, 13-noviembre-2017

El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, protagonista central del ajuste que el FMI le exige a la Argentina para otorgarle un crédito.
El proyecto de más de 300 páginas de reforma tributaria será enviado en la jornada de hoy a Diputados para su tratamiento. A pesar de que habrá muchas negociaciones y de que no se selló un acuerdo con las provincias, el secretario del Interior, Sebastián García de Luca, dijo que “sólo falta afinar la letra chica”.
Con la coparticipación a las provincias de la totalidad de lo recaudado por Impuesto a las Ganancias, María Eugenia Vidal verá satisfecho su pedido de aumentar los recursos del Fondo del Conurbano en 20 mil millones de pesos. Como no se modificará lo recibido por las otras provincias, esa pérdida del Anses será compensada con fondos del impuesto al cheque, que pasará de darle el 70 por ciento al organismo a darle el 100 por ciento.
El proyecto entrará al Congreso sin más cambios que los que anunció el gobierno: marcha atrás en los impuestos al vino, espumantes y cerveza. Se mantiene el impuesto a las bebidas azucaradas, lo cual enciende alarmas en provincias azucareras y en las cuales están asentadas las grandes embotelladoras (entre ellas, Córdoba).
El impuesto a la renta financiera será un punto de discusión. Si bien el gobierno incluyó estos gravámenes, sectores de la oposición piden otro tipo de presión para las entidades financieras. Los bancos dieron su aval al proyecto del gobierno para confrontar con proyectos como el del massismo, que podría cargarlos de una manera mucho más fuerte.
Según el discurso del gobierno, con la reforma se bajará la presión impositiva al 1,5 por ciento del PBI, aunque sin afectar la recaudación ya que confían en la reducción de la evasión fiscal, tal como deslizaron desde el Palacio de Hacienda.