Un enero helado en ventas
Los datos de las ventas minoristas de enero ratifican el frío que atraviesa la economía argentina y la constante caída del consumo. En el primer mes del año, se vendió un 10 % menos, medido en cantidades. “Enero se encontró con un cliente comprando lo justo y necesario y un empresario dispuesto a vender como sea”, dijeron desde CAME.
lunes, 4-febrero-2019

Ni las ofertas pudieron frenar la caída de las ventas.
La crisis económica que atraviesa nuestro país tiene a la pérdida de poder adquisitivo como una de las consecuencias más palpables. La caída del poder de compra de los salarios frente a la alta inflación, los despidos, las dificultades para obtener financiamiento barato y cuotas, marcaron el pulso de un enero con una actividad en caída. Las cantidades vendidas por los comercios minoristas descendieron un 10 % en el primer mes del año en comparación a igual mes del año pasado, según un informe de CAME.
Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa destacaron que este dato continúa con “la retracción que se acentuó especialmente desde agosto del año pasado”. En el texto, la entidad destaca que “se cumplieron así 13 meses consecutivos en declive” para un sector que viene reclamando a los gritos alguna medida para frenar el derrumbe. Para graficar esto, basta observar que el 77,4 % de los comercios consultados tuvieron bajas anuales en sus ventas, mientras que sólo el 15,5 % creció. En diciembre, los comerciantes que decían tener un año con caída de actividad era el 72,1 %. Las malas noticias se profundizan y no hay una salida a la vista en el corto plazo.
“Enero se encontró con un cliente comprando lo justo y necesario, y un empresario dispuesto a vender como sea”, expresaron desde CAME. Es tan marcada la baja de consumo que muchos comercios decidieron ofrecer grandes descuentos por compra en efectivo y facilidades de pagos con tarjetas, “en muchos casos asumiendo los costos” en un momento donde el financiamiento atraviesa una alta inestabilidad.
Un dato llamativo es el crecimiento de la venta online, en contraste con lo sucedido en los locales físicos. La vía electrónica aumentó un 4,8 %, aunque todavía no tiene una incidencia muy grande sobre el total de ventas (apenas 8 %), mientras que en los comercios la actividad retrocedió 11,6 %. Los sectores más golpeados fueron: bijouterie (-14,9 %), calzados y marroquinería (-14,8 %), muebles de oficina y hogar (-14,3 %), joyería y relojería (-13,8 %) y bazar y regalos (-13,8 %).
Al observar la evolución desde fines de 2016 en adelante, se observan bajas moderadas hasta mediados de 2017, para derivar en un ‘veranito’ entre septiembre y noviembre de ese año (con subas que no superaron el 1,6 %). Luego, volvieron las bajas, que se profundizaron desde la mitad de 2018: desde junio, todas las caídas interanuales de ventas en cada mes superaron el 8,4 %.