Una decisión nada saludable

Aunque fue la Nueva Asociación de Diabetes (NaDia), de Río IV, una de las principales impulsoras de que en el 2013 se aprobara una ley nacional que establece el 100% de la cobertura en los tratamientos de esta enfermedad, Córdoba sigue sin adherir, aplica su propio programa y es cada vez más complicado que el sistema público, obras sociales y prepagas cumplan con lo que establece la ley 26.914. El legislador Daniel Passerini, presidente de la comisión de Salud de la Unicameral, lo justifica con la promesa de “elaborar una ley provincial nueva este año”.

 miércoles, 4-julio-2018


Por Camilo Ratti

“A pesar de que fuimos autores de la ley nacional que garantiza el 100% de cobertura y tenemos a un gobernador como Schiaretti, que tiene diabetes tipo 1 desde hace años y no hay que explicarle los costos de los tratamientos y las dificultades para acceder a ellos, Córdoba sigue sin adherir a la ley nacional de Diabetes”, disparó a este portal Nidia Farhat, presidenta de Nueva Asociación de Diabetes (NaDia) una ONG de Río Cuarto que encabezó la lucha de miles de madres y padres de todo el país para que la Argentina contara con una ley modelo en la materia a nivel internacional.

“El Artículo 7 de la ley 26.914 establece que es una ley de orden público, que quiere decir que no puede ser contradicha por nadie, pero en Córdoba seguimos con una ley obsoleta, que habilita a que el ProCordia (Programa Córdoba Diabetes) y las obras social pongan todas las trabas para no garantizar el 100% de cobertura en medicamentos e insumos”, se queja Farhat.

La reglamentación en 2014 de la ley nacional estableció un Plan Médico Obligatorio para garantizar que los medicamentos e insumos se entreguen a quien lo solicita con sólo dos condiciones: la prescripción médica y la necesidad del paciente.

Sin embargo, en el territorio provincial esto no ocurre con una enfermedad que afecta al 10,7% de la población. “El ProCordia hace lo que quiere hasta que le llega una carta documento”, advierte la riocuartense. Según tres madres consultadas por Al Revés que prefirieron el anonimato porque se atienden por Apross, cada vez es más complicado acceder a tiras reactivas, sensores, aplicadores de insulina sin jeringas y agujas. “Incluso no prescriben las bombas de insulina porque no las conocen los médicos, hay un gran desconocimiento profesional sobre el tema”, afirman las familias consultadas.

estadísticas diabetes

Las estadísticas que utiliza la OMS sobre el porcentaje de diabéticos en Argentina es en base a información de ONGs, porque no hay números oficiales.

Apross, una lucha aparte

“Después de un año y medio de reclamarlo, con amparo de por medio, a una joven el Apross le reconoció que le tenía que entregar la bomba de insulina, pero no se la podían dar porque no saben dónde está, a ese punto hemos llegado”, sostiene Farhat sobre la institución que tiene 600 mil afiliados en la provincia.

Una mamá cuya hija es paciente de Apross y pidió reserva de su identidad, contó a Al Revés que “hace seis meses hubo un recorte del 30% en tiras reactivas que cuestan casi 1000 pesos las 50. Antes entregaban 3 cajas y ahora entregan dos, teniendo que pagar de nuestro bolsillo las 100 tiras que no entrega Apross, porque para que te den las otras 100 hay que hacer un trámite engorroso”. La burocracia tiene consecuencias directas en la salud: “O te medís menos la glucemia o desembolsas 1000 pesos por mes”, agrega.

Otro efecto negativo de los recortes estatales de Apross es que no cubre la nutricioniasta, “algo fundamental para un diabético, tanto de tipo 1 como de 2. El pilar del tratamiento de diabetes 1 es dieta e insulina, el de las 2, dieta y medicación, y en ambos ejercicio que por supuesto a nadie se le ocurre cubrir”, cuestiona quien es madre de una joven diabática tipo 1.

La enfermedad silenciosa

La diabetes tipo 2 está considerada la nueva pandemia mundial, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS) afecta al 11% de la población, pero con un agravante: ese 11% es sobre el 50% que sabe que padece la enfermedad, pero hay otro 50% que no sabe que la tiene o la puede llegar a tener por factores hereditarios, malos hábitos de vida o por consumir una dieta poco saludable. “Por eso la llaman la enfermedad silenciosa”, dice a este portal Constanza, una mamá de Buenos Aires que también militó la aprobación de la ley nacional en el 2013.

Farhat agrega que existen muchas demoras en la provisión de medicamentos porque no están en el vademécum del Apross, y hasta cuesta que reconozcan la diabetes tipo 2. “Nunca llegan los papeles y hay que reiniciar los trámites, lo que es sumamente engorroso para quienes vivimos en el interior, porque muchos médicos no quieren trabajar para el Apross. Hay que venir a Córdoba a retirar los medicamentos, es terrible, hay un Apross para la capital y otro para el interior de la provincia”.

La situación no es muy distinta para quienes se atienden en un servicio de salud prepago: “Depende de la cobertura que tengas y la cuota que pagues, pero la ley nacional obliga a que esas empresas también garanticen el 100% del tratamiento”, advierte quien recorrió el país para “tener una ley que nos proteja”.

el costo de un tratamiento de diabetes

El costo de un tratamiento es alto, sobre todo para la diabetes tipo 1, que necesita una dieta estricta e insulina.

Especialización y concientización

Tanto Nidia como Constanza participan de grupos de whatsapp nacionales para intercambiar información, trabajar para la aplicación de la ley en las provincias y en el acompañamiento de pacientes en la obtención de medicamentos e insumos. Y las dos aseguran que en el sistema de salud “faltan profesionales especializados en diabetes”.

Otro punto que destacan es la inexistencia de campañas de prevención como de concientización. “Una persona se puede morir por una hipoglucemia, y muchas veces los médicos no saben que se trata de eso, porque no tienen formación en una enfermedad que crece cada vez más”. Laura, otra mamá consultada por este portal advirtió que “los médicos en los dispensarios no tienen instrumental para medir la glucemia, no hay información en esos centros de salud. Cuando le pasó a mi hija, le diagnosticaron apendicitis”.

Sobre este tema, las mamás entrevistadas remarcaron que “Argentina no tiene estadísticas sobre diabetes, y la ley aprobada en el 2013 obliga a que éstas existan. Los números que maneja la OMS sobre el país están tomados del trabajo que hacemos las ONGs”.

“La salud es provincial”

Daniel Passerini es legislador de Unión por Córdoba, médico y presidente de la Comisión de Salud de la Unicameral. En diálogo con este portal, justificó la no adhesión de Córdoba a la ley nacional porque “la salud es una competencia de las provincias y estamos trabajando en un proyecto para que el Programa Provincial (ProCordia), que están en el ámbito del Ministerio de Salud provincial, tenga rango de ley”.

Daniel Passerini preside la comisión de Salud en la Unicameral

El legislador de UPC, Daniel Passerini, preside la comisión de Salud de la Unicameral y promete la discusión de una nueva ley provincial.

Desde su punto de vista, “muchas leyes nacionales son muy buenas pero su reglamentación hace que la aplicación provincial no lo sea, porque muchas veces no llegan los recursos de Nación”. En defensa de la posición oficial, señaló que “tuvimos tres reuniones en la comisión de Salud y seguramente en agosto vamos a convocar a ProCordia, al Apross y a las organizaciones que trabajan en el tema diabetes para elaborar una ley provincial que pueda actualizar por resolución los vademécum de Apross, para que no haya que cambiar la ley cada vez que haya que modificar algo”.

Las miles de personas que luchan contra un sistema de salud que prioriza la rentabilidad económica a la salud estarán esperando ansiosas la convocatoria. Porque como ellos lo experimentan día a día, “la angustia que pasan los pacientes es indescriptible” .