Una parada antes del ajuste
Después de ceder mucho más de lo anunciado en las negociaciones con los acreedores, el ministro Martín Guzmán aseguró que el paso siguiente que exigen los bonistas es un ajuste de las jubilaciones y subrayó que el gobierno nacional no está dispuesto a aceptar esas condiciones. "No entienden cuáles son las restricciones de Argentina", dijo.
martes, 21-julio-2020

El ministro de Economía Martín Guzmán aseguró que ya no hay más posibilidades de seguir mejorando la oferta para los acreedores de la deuda externa.
La negociación de la deuda con los tenedores de bonos bajo ley extranjera parece haber alcanzado el límite final y, según aseguró el ministro de Economía en una entrevista con TN, “los acreedores piden ajustar las jubilaciones y eso no lo vamos a hacer”.
Con esa última carta sobre la mesa, la decisión ahora queda del lado de los tres grupos de bonistas, Ad Hoc, donde se encuentra Black Rock, Exchange y el Comité de Acreedores de Argentina, poseedores de más del 33% de la deuda.
“Nosotros no nos queremos pelear con nadie, queremos resolver un problema que ya teníamos. Cuando se emitió esa deuda se pagaba 7% y los acreedores sabían que tomaban un riesgo elevado. No hay deudor irresponsable sin acreedores irresponsables. Ahora les pedimos que ganen menos”, agregó Guzmán.
En la última rueda de ofertas, el gobierno nacional elevó a u$s53,5 la propuesta argentina, a la que adhirió la mayoría de los bonistas, pero el grupo más duro reclama ahora u$s56,5 por cada u$s100 de la deuda contraída. “No entienden cuáles son las restricciones de Argentina”, dijo Guzmán y explicó que “lo que los acreedores piden significa tener que ajustar las jubilaciones y eso no lo vamos a hacer”.
El pronóstico de default no movería entonces la balanza para el lado de los bonistas que, Guzmán describió como “ese grupo de acreedores que rechazó nuestra oferta ya lo había hecho antes y no entiende cuáles son las restricciones de Argentina”. La propuesta “es definitiva” y representa “el máximo esfuerzo” del que es capaz la economía argentina, dijo el funcionario. “No queremos comprometernos con pagos que le impidan al país poner en marcha las políticas públicas que necesita”, concluyó.